Reina Jeanett Pineda Rosas y sus dos hijas, de 1 y 14 años, se quedaron únicamente con la ropa que llevaban puesta el pasado martes, luego que un incendio consumió su casa de lámina que habitaban las tres. La fémina, de 35 años, es madre soltera.
No logra retener las lágrimas al relatar que perdió lo poco que con esfuerzo había comprado.
El martes salió de su casa para visitar a su madre, que vive a cuatro metros de distancia, cuando cerca de las 12:00 del mediodía vio que su casa comenzó a incendiarse.
En ese momento salió corriendo para tratar de salvar algunos enseres domésticos; pero le fue imposible porque en pocos minutos las llamas estaban en toda la infraestructura de lámina y madera.
Trató de apagarlas echándole agua; aunque el esfuerzo fue en vano porque el fuego consumió la cocina, televisor, camas, ropa, los pocos alimentos que tenían y hasta los documentos personales de Reina.
La mujer lamenta las pérdidas materiales; pero agradece a Dios que al momento del incendio no se encontraban en la casa. Habían salido de ella media hora antes de que comenzara el siniestro.
El reporte del Cuerpo de Bomberos consignó que el incendio fue “causado por un cortocircuito en una extensión eléctrica improvisada”.
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Reina confirmó dicha causa; aunque también reconoció que la falta de recursos económicos le habían imposibilitaron hacer el gasto de instalación con la compañía que suministra el servicio. Un familiar le proporcionaba electricidad. Ya había gestionado ayuda con diferentes entidades, sin recibir una respuesta favorable.
La fémina relató que requiere de la colaboración de personas altruistas, principalmente para comprar la leche de su hija menor.
Lo poco que gana como ayudante de cocina no le permiten absorber los gastos adicionales que el incendio provocaron en su humilde familia.
Únicamente labora los fines de semana en Los Cóbanos, en Acajutla.
Ella reside en el caserío Arca de Noé, cantón Miravalle, de Sonsonate, y tras el incendio se encuentran de posada donde una hermana, en la misma comunidad.
“Quise apagarlo pero no pude porque empezaron a explotar las cosas, la cocina, el televisor, todo. El tambo de gas no explotó, ahí quedó. Fue duro para mí porque quedarse sin nada es bien tremendo; yo quise apagar pero no pude, ya estaba bien elevado el fuego. No saqué ‘naditita’. Es bien difícil para mí rehacerme de mis cosas de nuevo. Nos hemos quedado sin ropa, sin zapatos, sin nada”, expresó la fémina con lágrimas en sus ojos.
La alcaldía de Sonsonate inició el miércoles la construcción de una casa con valor de $3,000; también entregó víveres y dos camarotes. La vivienda será de block y lámina; le será instalado un adecuado sistema eléctrico.
Las personas que deseen ayudar a la fémina pueden comunicarse con ella al número telefónico 7447 9340.
“Es duro para mí ver eso tan quemado y no poder hacer nada. Mi niña (pequeña) llora para irse para su casita. Con la misma ropa andamos”, agregó.