Muerte de niños en cohetería clandestina de Santa Ana es por incumplir la ley, dicen diputados

Bomberos, alcaldías, Policía, Fuerza Armada y el Ministerio de Medio Ambiente son algunos de los encargados de revisar, sancionar y cerrar las coheterías clandestinas, de acuerdo a las últimas reformas a la ley de Pirotecnia aprobadas por la Asamblea.

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Vecinos y amigos retiran los escombros que dejó la explosión. Toda esta área estaba cubierta de paredes y lámina. Foto EDH / Jonatan Funes

Por Eugenia Velásquez

2020-12-06 1:12:50

“El problema no es de leyes, sino de fiel cumplimiento de leyes y de actuación de las instituciones que tienen competencia sobre estos problemas”, puntualizó el diputado Mauricio Ernesto Vargas, de ARENA, tras ser consultado por El Diario de Hoy sobre la explosión de una cohetería clandestina el sábado en Santa Ana que dejó como resultado tres niños quemados, de los cuales, dos murieron por la gravedad de las quemaduras y uno más lucha por su vida.

En la Asamblea se han venido dando reformas puntuales a la Ley Especial para la Regulación y Control de las Actividades Relativas a la Pirotecnia. Las últimas datan de 2018 y 2019. En este último año se hicieron modificaciones al tema específico de las coheterías clandestinas.

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En los foros que organizó el Congreso participaron miembros de la Cámara Salvadoreña de Artesanos y de la Comisión Técnica de Evaluación y Control de Productos Pirotécnicos y Sustancias relativas a la Pirotecnia.

En la referida normativa se hicieron cambios para regular y controlar las actividades relacionadas con la importación, internación, almacenaje, transporte, fabricación, comercialización, manipulación y exportación de productos pirotécnicos o de las sustancias relativas a la pirotecnia, así como sancionar las infracciones a la ley.

En la normativa quedó que la aplicación del cuerpo normativo le corresponde al Ministerio de la Defensa Nacional a través de la Dirección de Logística.

Ante esto, es que diputados del FMLN, GANA y del PCN, lamentan que la población no tenga conciencia de que las leyes existen para proteger a la niñez de ese tipo de incidentes, por lo que no descartan que de nuevo se estudie prohibir totalmente la elaboración, manipulación, distribución, comercialización y quema de pólvora, algo a lo que se oponen los dueños de coheterías.

Una niña y un niño son las víctimas mortales de la explosión de la cohetería clandestina en Lotificación el Jordán, cantón Ranchador de Santa Ana. Un tercer niño, de 10 años, también resultó herido y será trasladado a Estados Unidos para su atención médica. Foto EDH / Jonatan Funes

“Tenemos que valorar como país si dejamos de permitir que se siga fabricando pólvora, ha sido una tradición, pero yo sí creo que si esto continúa como comisión de Defensa seremos rígidos, podemos llegar a prohibir la pólvora, yo no puedo cargar con muertes de niños en el país, ya que tengo el poder de legislar, nosotros no podemos estar permitiendo que mueran más niños”, reflexionó el diputado del PCN, Reynaldo Cardoza.

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Añadió que la Asamblea, ya hizo reformas para prohibir las coheterías clandestinas, por lo que considera que la responsabilidad también es de los padres.

“La ley lo dice, es clara, es más, no pueden haber niños trabajando en una fábrica de pirotecnia, pero además de eso, la ley es clara que no pueden haber coheterías clandestinas, toda aquella persona que no entienda, que no haga caso, la Fiscalía y la Policía tendría que aplicar todo el peso de la ley, incluyendo a los padres de los fallecidos, yo sé que el dolor es grande, pero es responsabilidad de los padres ¿cómo se les ocurre tener niños en una cohetería?”, cuestionó Cardoza.

Para Vargas, el problema no es con las coheterías que funcionan legalmente, ya que éstas tienen inspecciones y normas técnicas que están debidamente especificadas, los micro o los pequeños artesanos no producen producto pirotécnico en su totalidad, sino que construyen parte de un todo de un producto terminado y esta parte es la que llevan a otro establecimiento en donde se tiene que profundizar más, narró Vargas.

“La única medida que me parece un poco draconiana (severo o muy rígido), es prohibir la fabricación de ésta, porque tiene un problema del empleo de los micro artesanos e impactaría en otro sector que debería ser sopesado sin pasionismos”, explicó Vargas.

Por lo que reiteró que para eso la Asamblea ha hecho en esta legislatura cuatro reformas más a la ley de la Pirotecnia. El problema es con las que funcionan de manera clandestina, opinó.

“Si no hay respeto de la ley, que las instituciones funcionen en el cumplimiento de las obligaciones que tienen”, aseveró Vargas.

Recordó que en las últimas adendas realizadas a la ley se regularon aspectos que no estaban normados, como es el caso de los artesanos, para definirles su campo de acción, cuáles son sus reglas de operación, las normas técnicas que deben seguir, los cubículos de trabajo, la distancia a respetar, y para que todo eso se aplique se delegó a Bomberos, a las alcaldías y a la Unidad de Armas y Explosivos de la Policía para que verifiquen si cumplen.

“Se reguló a todos los artesanales que se decía que ese era el problema, estoy casi seguro que lo que sucedió es que estaba sin autorización y era clandestina. La norma determina las zonas y áreas en donde puede haber una cohetería”, ahondó Vargas.

Explicó que la responsabilidad ahora es de las instancias competentes para hacer valer la ley. “Desde el punto de vista técnico es casi similar al mercado negro de armas, en la distribución de la droga, este es un mal que definitivamente no está siendo atacado desde la parte que toca a las instituciones que les corresponden, las alcaldías, la Unidad de Armas y Explosivos de la PNC, todos tienen funciones que cumplir, Bomberos, allí están Salud, y son ellos quienes solicitan las normas y todo, pero no se operativizan y si se hace es de manera deficiente y aislada”, criticó Vargas.

El diputado Juan Carlos Mendoza, de GANA, quien preside la comisión de Defensa, que es la encargada de estudiar la ley de Pirotecnia, explicó que cuando hicieron las reformas a la normativa, en lo primero en que pensaron fue en los niños, que los infantes no estuvieran involucrados en la producción de la pólvora ni en toda la línea que sigue hasta su venta.

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“La ley no permite que hayan niños, lo otro que podemos ver en ese accidente es que estaban trabajando productos pirotécnicos, es una fábrica clandestina, mientras las autoridades correspondientes no se den a la tarea de buscar esos lugares prohibidos, esos lugares deben ser bien aislados, las reglas son bien específicas. Pienso que es la aplicación de la ley de ir a buscar, cerrar, decomisar y sancionar”, comentó Mendoza.

Añadió que para deducir la responsabilidad de los padres no solo está la Ley de la Pirotecnia, también la Ley Lepina, el Código Penal, pues consideró que “allí los padres de familia tienen un papel muy importante que jugar, son los encargados de cuidarlos, la ley también dice que son los encargados”.

Sin duda, dice Mendoza, que de nuevo el tema de la pólvora y nuevas reformas a la ley volverá al seno de la Asamblea por lo mediático del suceso.

Mientras que el diputado Manuel Flores, del FMLN, explicó que lo único que queda es que la ley se aplique.