A dos años de haber iniciado la pandemia por covid-19, el Día de los Difuntos estará marcado de nuevo por medidas sanitarias estrictas para prevenir contagios en los cementerios, pasando por el uso obligatorio de la mascarilla para el ingreso, la exigencia de la cartilla de vacunación y la restricción de no permanecer en el interior por más de una hora.
El Ministerio de Salud, a través del acuerdo No. 2526 que emitió el 7 de octubre y envió a todas las municipalidades del país, también establece que tales disposiciones tienen que ser cumplidas por dueños y administradores de cementerios públicos y privados, así como por todos los ciudadanos que acudan con el fin de rendir tributo a sus difuntos.
Según lo indicado por Salud, quienes visiten los camposantos tienen que guardar la distancia social requerida y no colocar floreros con agua a fin de evitar que se conviertan en criaderos de zancudos.
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Las comunas deberán ubicar a la entrada o entradas una estación de desinfección que deberá contar con bandejas con desinfectante para calzado, dispensador de alcohol gel, agua y jabón; realizar la toma de temperatura a empleados y dolientes.
“Por cada sepultura se permitirá la visita simultánea de no más de tres personas, y estas deben cumplir el distanciamiento social”, indica el escrito.
Las municipalidades tienen el mandato de colocar en sitios estratégicos depósitos para desechar mascarillas y guantes, entre otros.
Salud, además, determinó que los dueños y administradores de estos recintos deben colocar personal técnico capacitado que oriente y supervise el cumplimiento de estas disposiciones preventivas.
Las medidas contenidas en el acuerdo ejecutivo apuntan que ese día no se programará inhumaciones de personas fallecidas por sospecha o confirmadas de covid-19; además, no se permitirá que las personas ingresen a áreas destinadas a fallecidos por ese mal.
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“Se prohíbe la venta de alimentos dentro de las instalaciones del cementerio” y “no permitir el ingreso de vendedores”, señala.
Las comunas están llamadas a regular el ingreso de trabajadores que se dedican a limpiar y dar mantenimiento a las sepulturas, así como la instalación y funcionamiento de puestos de venta en los alrededores de los cementerios.
Según el acuerdo ministerial, habrá personal del Sistema Nacional Integrado de Salud verificando el cumplimiento de estas disposiciones.
Alcaldías listas
En los últimos días se pudo conocer que varias municipalidades ya coordinaron para cumplir las disposiciones de bioseguridad establecidas por el Ministerio de Salud en el marco del Día de los Difuntos, algunas incluso han acordado ser más estrictas en algunos de los aspectos, como el tiempo de estadía.
Si bien Salud señaló que los visitantes pueden estar máximo una hora en las instalaciones de los cementerios, alcaldías como la de Antiguo Cuscatlán, en La Libertad, así como la de Moncagua, en San Miguel, optaron por dar 30 minutos para ello; mientras en San Francisco Gotera, en Morazán, de forma adicional no permitirán el consumo de bebidas embriagantes.
Adilio Torres, alcalde de Moncagua, explicó que ellos aplicarán las medidas de bioseguridad el 1 y 2 de noviembre. En este contexto estará prohibido el ingreso de menores de 12 años y mayores de 65, tampoco el de personas con síntomas compatibles con el covid-19; además, no permitirán ventas de comida, ni el ingreso de mariachis.
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La Alcaldía de San Francisco Gotera, en Morazán, arranca con el protocolo de bioseguridad desde el sábado 30 de octubre.
Para el municipio de La Unión han dispuesto que en el cementerio general, adicional a la exigencia de otras medidas estipuladas por Salud, también habilitarán una puerta de ingreso y dos para la salida, pero las autoridades también contemplan visitar los cementerios ubicados en los caseríos y cantones para verificar que el protocolo sanitario se cumpla.
Óscar Parada, alcalde de dicho municipio, informó que coordinarán con las directivas de las comunidades encargadas de la administración de cementerios para que el ingreso y la salida sean ordenadas.
“Vamos a estar activos trabajando estos días para poder desarrollar con normalidad esos dos días. Le pedimos a la población que nos colabore con toda la logística que se estará desarrollando junto a las otras instituciones involucradas en la comisión (municipal)”, citó.
Ventas alejadas de los cementerios
En Ahuachapán, de igual manera empiezan con las medidas de bioseguridad desde el fin de semana. Según Carlos Saldaña, encargado del cementerio, el ingreso se dará por el portón principal, pero no permitirán que entren más de dos personas por familia para evitar aglomeraciones. La salida será a un costado del recinto para mejorar la fluidez.
Aunque la comuna ahuachapaneca favorecerá la instalación de ventas, sí determinó que éstas queden a cien metros de distancia del camposanto y tendrán que guardar un metro y medio de distancia entre ellas.
Mientras en Metapán, Santa Ana, que fue el lugar inicial del país en donde se identificó la primera persona positiva a covid, el ingreso al cementerio estará habilitado entre 7:00 a.m. y 5:00 p.m. Sin embargo, la población no podrá entrar a la zona en donde se entierran personas con sospecha de covid-19 o confirmados, indicó Francisco Lemus, miembro del Comité de Protección Civil Municipal.
Estéfany Díaz, encargada de aplicar los protocolos de bioseguridad, dijo que “solo estará permitido el ingreso de tres personas por familia que cuenten con su respectiva cartilla de vacunación”.
Díaz expuso que las personas solo podrán permanecer máximo 45 minutos en el cementerio y no se permitirán ventas en el interior.
Para el cementerio Santa Isabel, de la ciudad de Santa Ana, la respectiva comuna ya definió medidas para los dos primeros días de noviembre, por ejemplo estarán habilitadas dos entradas y habrá personal apostado para verificar que los residentes cumplan las indicaciones. Estas acciones se darán en los siete cementerios de la localidad.
Las autoridades edilicias santanecas afirmaron que el ingreso será de 7:00 a.m. a 5:00 p.m, en un promedio de 200 personas por 45 minutos, y las ventas estarán afuera del cementerio, pero solo comida para llevar.
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La oficina de comunicaciones de la alcaldía de Antiguo Cuscatlán informó el miércoles que las autoridades edilicias incluso han determinado entregar mascarillas para aquellos visitantes que no lleven; además en su caso no permitirán ventas ni en los alrededores del cementerio.
En otras localidades, como San Miguel Tepezontes, en La Paz, las autoridades edilicias han conformado una comisión para atender y orientar a quienes asistan al cementerio en la víspera y el propio Día de Difuntos, pero los que lleguen solo podrán estar una hora aplicando todas las medidas, mascarilla, uso de alcohol gel, distanciamiento social.
Miguel Pérez, un líder comunitario de este municipio, comentó que ahí el concejo ha permitido instalar ventas en la calle pero con distanciamiento requerido; sin embargo, no se dará oportunidad de que entren vehículos sobre la calle de acceso.
En San Salvador el alcalde Mario Durán informó que para la fecha dispondrán de 300 empleados para las diversas actividades que implican aplicar las medidas sanitarias en los parques memoriales La Bermeja, Los Ilustres, Las Parcelas y Maquilishuat.
Durán sostuvo que solo se permitirá la entrada de tres personas por familia con una permanencia máxima de 45 minutos, aunque a la zona covid-19 de La Bermeja únicamente podrán ingresar dos personas por nicho y habrá empleados que se encargarán de llevar los arreglos de flores hasta las tumbas.
Mejicanos, según informes que la comuna colgó en redes sociales, pondrá en marcha el protocolo de bioseguridad el 1 y 2 de noviembre, en este caso las personas podrán visitar la tumba de sus seres queridos entre las 7:00 a.m. y 4:00 p.m, pero solo dos por sepultura, cumpliendo el requisito obligatorio de uso de mascarilla, entre otras.
“Solo se permitirán 100 personas máximo dentro del cementerio cada 45 minutos”, indica un mensaje de esa municipalidad.