Este año muchas cosas han cambiado debido a la pandemia. La nueva normalidad ha obligado a todos los establecimientos a aplicar protocolos de bioseguridad que minimicen el riesgo de contagios y esto incluye a los cementerios.
“En el caso del cementerio Jardín, en Soyapango todos los jardines tienen a personas enterradas bajo protocolo Covid, por eso fue imposible permitir el ingreso a los familiares, pero les hemos dado la opción de recibir las flores, colocarlas y enviarles una foto para que tengan un recuerdo de este día”, dice América Carpio, empleada del cementerio.
Con el transcurrir de la mañana, y a pesar de estar conscientes que no podrían entrar, decenas de familias se acercaban, sosteniendo ramos de flores para recordar y honrar a sus seres queridos.
Hija de fallecida por neumonía durante la pandemia
Arely Avilés llegó al cementerio a enflorar a su madre, quien falleció de neumonía hace tres meses ella cuenta que ya sabían que solo podrían entregar las flores, pero que aún así decidió llegar para honrar a su madre. “Ha sido muy muy difícil, porque no la pudimos enterrar donde quería ella. Uno no se imagina que realmente puede vivir esto, y cuando oye que a alguien le ha pasado dice: ay lo siento, pero jamás está en esos zapatos”, dice Avilés.
Para Avilés, aunque los protocolos son necesarios, pudieron ser un poco más flexibles. “Aunque sea hubiesen permitido que entrara una persona o aunque sea de lejos, así como cuando la enterramos”, asegura.
Hija de fallecida por sospechas de COVID-19
Elida Fuentes también llegó al cementerio a enflorar a su madre, quien falleció bajo sospechas de COVID-19. “Nunca pensamos que la íbamos a venir a enflorar. Nunca pensamos que ella se iba a enfermar de esto porque nosotros la cuidamos bastante”, afirma.
Según Fuentes, su madre fue ingresada en el hospital Rosales por un dolor en el hígado, pero fue mezclada con pacientes sospechosos del virus. Tenía 53 años.
Hijo de fallecida por sospechas de COVID-19
Miguel de León llegó al cementerio junto a su esposa con la esperanza de poder ver la tumba de su madre, pero se llevó una amarga sorpresa al enterarse que no podría entrar.
María Carmen de León falleció por insuficiencia respiratoria hace unos meses. Tenía 91 años y fue enterrada bajo protocolo covid. Sus familiares lamentan que aún cuando han pasado varios meses aún no han podido visitar su tumba y esperan que esto pase pronto.
Al cementerio no solo llegaron familiares de personas fallecidas durante la pandemia, también acudieron parientes de fallecidos por causas naturales o accidentes, pero debido al mismo protocolo, tampoco pudieron ingresar.
Madre de joven fallecido en accidente de tránsito:
“Tenemos dolor y ahora es más porque no podemos estar cerca de donde están sus restos”, dice Victoria Mendoza quien perdió a su hijo en el año 2019 tras un accidente de tránsito.
El conductor de un vehículo particular que se conducía a excesiva velocidad y bajo los efectos del alcohol, impactó contra una coaster en Sierra Morena. El cuerpo de Joel Eduardo Mendoza salió de la unidad del transporte público por la puerta trasera, debido al fuerte impacto, quedando atrapado bajo la unidad y falleciendo minutos después.
A pesar que el accidente ocurrió hace más de un año, para su madre, es como si hubieses pasado ayer. Victoria Mendoza explica que parte de su consuelo era visitar el cementerio y hablar con su hijo y asegura que no poder visitar su tumba desde hace meses por la pandemia ha sido un proceso doloroso, pero que entiende que es importante acatar las medidas de bioseguridad para mantener a salvo al resto de su familia.
Esposa de fallecido en accidente laboral
Francisca Pineda Hernández, fiel a la memoria de su difunto esposo, llegó este 2 de noviembre para llevarle flores. Estuvieron casados durante 20 años, y aún lo recuerda con el mismo amor del primer día.
Calixto Sanchez Morales falleció mientras podaba un árbol, su esposa cuenta que cayó de una altura de tres metros y medio, luego del accidente fue trasladado a un centro asistencial, sin embargo, no pudo resistir debido a la gravedad del golpe.
“Si me causó sentimiento porque no entré a verlo. Para estos días uno se siente contento porque ve la tumba y uno platica con ellos, pero saber que yo no he podido verlo me siento triste”, dice Francisca Hernández.
Ambiente en otros cementerios
A diferencia del cementerio Jardín, otros cementerios sí han permitido el ingreso de familiares, ya que no todos sus espacios fueron ocupados para realizar entierros de personas que fallecieron bajo sospechas del virus.
Todos los cementerios que permiten el ingreso, han implementado diferentes protocolos, entre estos: el uso de mascarillas y alcohol gel, la toma de temperatura, el distanciamiento físico, tiempo limitado dentro de las instalaciones y el paso restringido para grupos de alto riesgo, como embarazadas y personas mayores de 60 años.
