VIDEO: Ocho pequeñas tumbas de grandes personajes de El Salvador

En el cementerio de los Ilustres hay todo tipo de sepulturas. Muchos nombres reconocidos por su legado histórico descansan en modestas tumbas, que incluso pasan desapercibidas entre el lujo y la majestuosidad de vistosos mausoleos.

descripción de la imagen
Por mucho tiempo, el cementerio de Los Ilustres era el único panteón en San Salvador y su construcción y distribución se fue dando con el crecimiento de la ciudad.

Por Eduardo Alvarenga

2020-11-02 6:00:21

En medio de grandes mausoleos y ostentosas construcciones, que se caracterizan por complementarse con lujosas esculturas de mármol traídas desde Italia a inicios del siglo XX, se encuentran modestas tumbas que sorprenden con nombres históricos salvadoreños en sus epitafios, dentro del cementerio de Los Ilustres de San Salvador.

La historia de Los llustres inició en 1848, cuando se sepultó allí los restos del general Francisco Morazán, que fueron enviados desde Costa Rica, donde había sido fusilado en 1842. La de Morazán es la tumba más antigua del cementerio, aunque el primer mausoleo se cayó en un terremoto de 1873, pero fue vuelto a construir. Esta es considerada como el punto cero, antes de eso, las personas eran enterradas en iglesias de su localidad, si poseían un estatus social alto o en los terrenos de sus casas.

 

Por mucho tiempo, el cementerio de Los Ilustres era el único panteón en San Salvador y su construcción y distribución se fue dando con el crecimiento de la ciudad. Las calles del cementerio se distinguen alfabéticamente, aunque su nombramiento no es correlativo en todos los tramos. Otra forma de división del cementerio es por áreas o cuadros, cada una de las cuales está dedicada a un personaje histórico o una comunidad, cuyos restos descansan dentro de ellas. Dentro de estas áreas están el cuadro Morazán, Araujo, Masferrer y Amate. Este último, donde se sepultaban personas de clases populares.

La diversidad de Los Ilustres

“Acá vamos a ver personas de toda índole, no solamente de la élite económica, sino que vemos mucha diferencia entre cada sepultura. Acá no hay una clase económica dominante”, menciona Mario Díaz, guía de la Secretaría de la Cultura de San Salvador. Si bien dentro del cementerio abundan los grandes monumentos, con apellidos de la élite económica de El Salvador, el camposanto también es una réplica de la diversidad de clases sociales que ha tenido el país. Muchos poetas, científicos y políticos se encuentran enterrados en Los Ilustres.

En cuanto a la estética de los mausoleos también es variada. “Muchos de los mausoleos de finales del siglo XIX y principios del siglo XX tienen una corriente arquitectónica del art nouveau o pueden ser del arte neoclásico que estaban en auge en ese entonces, una corriente europea que llegó hasta El Salvador”, explica Díaz.

LEE TAMBIÉN: Seis edificios antes y después del terremoto de 1986 en San Salvador

Conservación del cementerio
Estas joyas arquitectónicas constituyen un patrimonio importante de la historia del país, razón por la cual en 2009 la municipalidad de San Salvador la declaró como “zona cultural protegida”. A pesar de ello, cada una de las tumbas pertenecen a perpetuidad a las familias, las cuales pagan una tasa municipal, por esta razón el mantenimiento y conservación del parque en general lo hace la Administración de Cementerios, pero el de cada tumba corresponde a las familias que las heredan.

“Muchas familias tienen la potestad sobre las tumbas, por eso algunas son sencillas porque la familia así lo quiere, otras son muy ostentosas y monumentales porque la familia así lo ha construido. Algunas tumbas están en deterioro, pero eso no depende de la municipalidad que administra el complejo, sino de cada familia”, explica Díaz.

La tumba de Salvador Salazar Arrué.