Tras la ruptura de una tubería de refrigeración de material peligroso en una empresa avícola de Soyapango, por la que algunos menores sufrieron problemas respiratorios, el Ministerio de Medio Ambiente y Recursos Naturales (MARN), informó que realizó junto a la Fiscalía General de la República una inspección para evaluar si la empresa cuenta con protocolos de manejo de este tipo de químicos.
Según el informe del MARN, la fuga expandió unos 50 kilogramos de gas al ambiente y se esparció en un radio de 100 metros a la redonda aproximadamente, en donde las zonas más afectadas fueron la comunidad Bambudal y las cercanas al reparto Morazán, en Soyapango.
También, los expertos en materiales peligrosos del MARN, sostuvieron que al parecer la ruptura de la tubería fue provocada por una baja temperatura que congeló el agua en el interior del sistema de enfriamiento.
En la inspección, las autoridades verificaron las acciones de la empresa para detener la fuga, el estado de los químicos, el proceso de refrigeración, el almacenamiento y la disposición del agua utilizada en dicho proceso.
Una comisión del Ministerio de Salud y la Unidad Ambiental de la alcaldía de Soyapango, también realizó un recorrido para sus respectivos trabajos de supervisión tras el hecho ocurrido la noche del miércoles.
No se llamó a los bomberos
Según la ministra de Medio Ambiente, Lina Pohl, quien al conocer sobre la fuga, se presentó al lugar, se comunicó con el director de Cuerpos de Bomberos, quien le detalló que la empresa no autorizó el ingreso de un delegado de la institución para hacer trabajo de verificación dentro de la fábrica.
“No fue la empresa la que llamó a bomberos, como debería ser en un accidente industrial, sino la población quienes pusieron la denuncia y llamaron a los medios de comunicación”, dijo la ministra Lina Pohl.
Geotérmica, Usulután
El MARN también comunicó que ya se está elaborando un informe con todos los detalles sobre el caso de la Geotérmica Berlín, Usulután, de la cual también se denunció sobre malos olores que salían de uno de los pozos identificado como TR17, el cual se encontraba en mantenimiento.
El fétido olor se propagó en el ambiente y provocó incomodidad en los habitantes de la zona.
Según los especialistas del MARN, este jueves ya no se percibía ningún mal olor, sin embargo se está trabajando en un informe con los parámetros de mediciones. “El error recayó en la falta de comunicación al no informar del mantenimiento del pozo, a la población”, consideró el técnico del MARN, Oscar Orellana.
Nota | Central Geotérmica no informó a población sobre mantenimiento de pozo
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— MARN El Salvador (@MARN_SV) 15 de marzo de 2019