Penal de Mariona sumará 2,592 espacios para internos en junio

Las nuevas instalaciones son construidas de cuatro niveles;  el primer piso será para las visitas, lavandería, aulas, talleres y otros servicios, mientras que el resto del edificio para las celdas y dormitorios.

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Ampliación del penal de Mariona. Foto cortesía

Por Enrique Carranza

2019-03-08 4:47:51

La ampliación del  Centro penal La Esperanza, ubicado en el cantón San Luis Mariona, Cuscatancingo , sumará 2,592 espacios para internos; la inversión de la obra asciende a $ 14,180,655.25 que provienen del Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE).

Hoy el vicepresidente de la República, Oscar Ortiz, junto al director general de Centros penales, Marco Tulio Lima, recorrieron hoy la zona de trabajo en la construcción que tiene un avance del 51%.

Las nuevas instalaciones son construidas de cuatro niveles;  el primer piso será para las visitas, lavandería, aulas, talleres y otros servicios, mientras que el resto del edificio para las celdas y dormitorios.

En junio de 2018, las autoridades aseguraron que los trabajos tardaría 12 meses.

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Esa construcción se suma a las obras en infraestructura que se ejecutando en el sistema penitenciario, con el objetivo de contribuir a reducir el hacinamiento carcelario en un 136%; logrando uno de los niveles más bajos en Latinoamérica.

En general, las autoridades de Justicia y seguridad pública tienen proyectado habilitar a corto plazo alrededor de 20 mil espacios con una inversión total de $58,020,501.73.

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A la fecha están en funcionamiento las Granjas penitenciarias: en Santa Ana con capacidad para 2 mil internos y Zacatecoluca con más de mil reos, la ampliación del complejo Penitenciario de Izalco, el cual contiene el Centro Penal de Izalco Fase II, Fase III y la Granja Penitenciaria haciendo un total de 4,464 espacios. Recientemente se habilitó, el Centro de Detención de Santa Ana y próximamente el Centro de Detención de Izalco, cada uno con capacidad para 3,060 privados de libertad, entre otras infraestructuras.

La Dirección general de centros penales trabaja en una reingeniería penitenciaria acorde a la Ley; ya que los centros penales por décadas estuvieron abandonados con una infraestructura inseguras e insalubres, donde los privados de libertad carecían de programas necesarios para su rehabilitación y reinserción. Las autoridades trabajan por dejarle al país un sistema más humano, moderno, seguro, pero sobre todo rehabilitante.