Para este año, el Ministerio de Educación, Ciencia y Tecnología (Mineducyt) prevé ampliar de 475 a 2,000 la cifra de instituciones educativas públicas que reciben atención psicológica a través de distintas acciones, afirmó la directora Nacional de Programas Sociales y Prevención, Mélida de Barrera.
De Barrera explicó que el Mineducyt solo tiene entre 40 y 60 psicólogos contratados, pero en los últimos tiempos han capacitado a docentes para que tengan herramientas que les permitan actuar ante problemas que se generan dentro de las escuelas, y que a su vez repliquen estos conocimientos con profesores, padres de familia y alumnos con quienes proceden a formar comités de primeros auxilios psicológicos.
Según datos de esa cartera de Estado los psicólogos han formado a un total de 812 profesores, de ellos 234 sobre convivencia y prevención de violencia en la escuela y 578 en el tema de educación integral de la sexualidad. Estos a su vez han trabajado con otros 5,663 docentes.
La técnico de Educación aseveró que este mes comienza otro ciclo de capacitaciones de profesores en estas áreas.
El año pasado formaron 86 comités en igual número de escuelas, con participación de directores, miembros de los Consejos Directivos Escolares, docentes, padres de familia y estudiantes, y una de sus tareas es dar charlas y orientar acciones en las aulas para prevenir o atender situaciones de crisis.
La directora nacional de programas sociales manifestó que atenderán más escuelas debido a que abrirán sedes de atención psicológica en cada departamento, en donde habrá un promotor y dos psicólogos.
Según indicó, en la actualidad bajo el programa Ibrea también hay 1,800 educadores formados en educación del cerebro, y según indicó este año trabajarán con otro grupo. Aseguró que “es otro programa que unido con la atención psicológica nos previene también. Es educar el cerebro para evitar conflictos, para ser más proactivos, para que el maestro esté más sano”.
Educación implementará nuevo método para enseñar Matemáticas, ¿en qué consiste?
La medida será efectiva a partir de este año, desde primer grado de Educación Básica hasta bachillerato. Alumnos tendrán que razonar y estar más activos durante la clase.
Al consultar a De Barrera sobre la incidencia de problemas entre los escolares señaló que “estamos detectando que el niño y la niña a veces llegan con traumas históricos”, es decir que han pasado de una generación a otra de su familia, por ejemplo si los abuelos fueron violentos o fueron víctimas de alguna situación.
La situación económica de la familia, la desintegración familiar, también forman parte de la carga psicológica en los alumnos, señaló.
De ahí que advierte que a través de los comités se está tratando de detectar estas situaciones, incluso casos de drogadicción, trata de personas y enfermedades de transmisión sexual como el VIH, y que los niños no saben como manejar.
“Nosotros prevenimos. Les damos charlas (a los estudiantes), los jóvenes son asistidos y ellos replican, andan como agentes gestores de cambio en las aulas dando charlas sobre todo eso”, subrayó.
El especialista en educación, Óscar Picardo, sostiene que dado el ambiente de violencia que predomina en el país la atención psicológica ya debería estar en la totalidad de centros de enseñanza estatales.
Se requiere más psicólogos
Para Picardo, director del Instituto de Ciencia, Tecnología e Innovación de la Universidad Francisco Gavidia, la atención psicológica en el sistema educativo público es una deuda histórica y las acciones que ejecuta el gobierno no son suficientes y a su criterio es un tema que hay que tomarlo en serio y darle más apoyo a las escuelas.
“Nuestra recomendación es el nombramiento de un psicólogo en cada escuela, de entornos desfavorecidos particularmente. No solo un programa de dar una capacitación de dos o tres días, sino algo más formal, que le ayude tanto al alumno como al maestro, como un soporte técnico cuando el maestro identifica problemas de agresión, de violencia, de bullying, que pueda recurrir al psicólogo y este pueda intervenir”, subrayó.
Picardo, quien ha impulsado y participado en varias investigaciones sobre violencia escolar en las escuelas, precisa que los niveles de violencia, de homicidios que hemos tenido en el país impacta en las comunidades.
Docentes esperan que el futuro gobierno invierta más en mejorar la educación
“Hay muchos homicidios cercanos a la escuela, que no tienen nada que ver con la escuela pero como es familiar de un estudiante, padre o madre de un estudiante, todos esos factores infectan el ambiente escolar. Eso obviamente altera el comportamiento normal de un niño”, subraya.
El pedagogo externó que un estudio sobre violencia que desarrollaron en 2015, en 83 centros educativos de El Salvador y 115 de Honduras y con apoyo de investigadores de la Universidad Nacional de Honduras (UNAH), determinaron que en el caso salvadoreño muchos de los centros educativos que están en lugares desfavorecidos tienen demanda de atención psicopedagógica y psicológica, de ahí que una de las recomendaciones del estudio fue la de que se asigne un psicólogo en los centros para que no solo ayuden con problemas críticos de aprendizaje, sino también atiendan in situ problemas relacionados con la familia y la comunidad.