La nueva medida de distanciamiento que sugiere una científica para evitar la transmisión de COVID-19

Al parecer, la distancia que hasta el momento recomienda la OMS no es suficiente para evitar el contagio del coronavirus, según un nuevo estudio.

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Foto AFP

Por V. Jurado/ Agencias

2020-03-31 11:28:08

El estudio realizado por una científica de Massachusetts Institute of Technology (MIT), Estados Unidos, Lydia Bourouiba, sugiere una nueva medida de distanciamiento para evitar el contagio del nuevo coronavirus.

Según la investigación de la profesora del MIT, la cepa podría viajar más de dos metros, por lo que sugiere que debería mantenerse una distancia de 8 metros.

Esta sugerencia marca una gran diferencia con las recomendaciones que han dicho los expertos como la Organización Mundial para la Salud (OMS) y los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades en Estados Unidos (CDC), que estiman una distancia entre uno y dos metros para evitar el contagio del COVID-19.

De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud cuando una persona infectada con este nuevo virus tose o estornuda proyecta pequeñas gotículas que contienen el virus y sí se está muy cerca se puede inhalar el virus, por eso, es clave ante la pandemia mantener una distancia adecuada.

La científica declaró que dichas organizaciones basan sus proyecciones en “gotas grandes” como forma de transmisión y la idea “cierta” de que esas gotas pueden recorrer una distancia corta.

Sin embargo, Lydia Bouroubia expresó a USA Today que “es urgente revisar las pautas que actualmente están dando la OMS y los CDC sobre las necesidades de equipo de protección, particularmente para los trabajadores de atención médica de primera línea”.

La científica dice en el estudio publicado en el Journal Of the American Medical Association que “la dicotomía entre las gotas grandes y las de pequeñas sigue siendo el núcleo de los sistemas de clasificación de rutas de transmisión de enfermedades respiratorias adoptadas por la Organización Mundial de la salud y otras agencias”.

Por lo que, la científica sostiene “Incluso cuando se aplicaron políticas de máxima contención, la rápida propagación internacional de COVID-19 sugiere que el uso de límites de tamaño de gota arbitrarios puede no reflejar con precisión lo que realmente ocurre con las emisiones respiratorias, posiblemente contribuyendo a la ineficiencia de algunos procedimientos utilizados para limitar la propagación de enfermedades respiratorias”.

La investigadora también dijo “un estudio reciente ha demostrado que las exhalaciones, los estornudos y la tos no consisten en gotas mucosalivares que siguen trayectorias de emisión semibalísticas de corto alcance, sino que están formadas por una nube de gas turbulento multifásico que atrapa el aire ambiental y atrapa y transporta dentro de gotas agrupadas con un continuo tamaño de gotas”.

“Las gotas que se asientan a lo largo de la trayectoria pueden contaminar las superficies, mientras el resto permanece atrapado y agrupado en la nube en movimiento”, dijo.

Hasta el momento, la Organización Mundial de la Salud (OMS) no se ha pronunciado sobre la nueva sugerencia.

Sin embargo, en un comunicado detalló que “La OMS agradece los estudios de modelado, que son útiles para fines de planificación. Los equipos de la OMS trabajan con varios grupos de modelos para informar nuestro trabajo”.