Sahar Tabar, la mujer iraní que saltó a la fama por someterse a decenas de cirugías estéticas para parecerse a Angelina Jolie, fue detenida en Irán por un delito de blasfemia, según informó la agencia local de noticias Tasnim News.
El tribunal de orientación de Teherán, que se ocupa de “delitos culturales y casos de corrupción moral y social”, ejecutó la orden de arresto el sábado por la noche. En concreto, Tabar fue acusada de incitar a la violencia; inducir a los jóvenes a sobornar; incumplir el código de vestimenta nacional; cometer blasfemia y obtener ingresos por medios inadecuados.
La influencer iraní, de 22 años, alcanzó la fama mundial en Instagram a finales de 2017 por sus múltiples retoques faciales, que han modificado drásticamente su apariencia. Entonces, el medio británico The Sun aseguró que Tabar se había sometido a más de 50 cirugías para parecerse físicamente a la actriz estadounidense Angelina Jolie.
Otros usuarios de redes sociales aseguraban que se parecía a Emily, la novia en la película de stop-motion The Corpse Bride de Tin Burton, cuya voz es de la actriz Helena Bonham Carter en la cinta de 2005.
Tras los duros ataques, Tabar se defendió de las críticas y aseguró en una entrevista que no buscaba parecerse a nadie.
“Nunca pensé en parecerme a Jolie. Y tampoco quiero parecerme al personaje de dibujos animados ‘La novia cadáver”, dijo en declaraciones al portal Sputnik. “Cada vez que publico una foto, hago que mi cara se vea más divertida y graciosa. Es una forma de autoexpresión, una especie de arte. Mis fans saben que ésta no es mi cara real. Ahora puedo ver que tengo algo en común con ella (con Jolie), pero yo misma soy mi musa y parecerme a alguien no es mi objetivo”, sentenció.
La mujer cuenta con más de 26,800 seguidores en Instagram. Esta es la única red social permitida en Irán, donde aplicaciones como Twitter, Telegram o Facebook están prohibidas.
En Irán, las autoridades generalmente toman medidas enérgicas contra lo que determinan como una influencia cultural de Occidente. Muchos de los extremistas de la república islámica consideran que el país sostiene una “guerra blanda” cultural contra la occidentalización que cambia sus costumbres.
El poder judicial de Irán anunció en junio una línea telefónica para que el público reportara cualquier violación a las normas sociales, incluida la vestimenta y conducta. Tasnim señaló que la mujer fue detenida luego de que las autoridades recibieron varias llamadas de personas quejándose.
Su apariencia en las publicaciones ha causado controversia en Irán, donde algunos de sus seguidores han criticado cómo se ve y que recurriera a la cirugía plástica.
Aunque las rinoplastias son algo común en el país de Medio Oriente tanto para las mujeres como para los hombres, la cirugía a la que se sometió Fatemah parecía ser mucho más extrema.
En los últimos años, las iraníes, sobre todo en la capital Teherán, han portado de una manera más suelta el pañuelo obligatorio que cubre el cabello, provocando la ira de los conservadores.