Cuando parecía que su situación estaba mejorando pues había logrado superar una etapa crítica de Covid-19; un joven sufrió un desafortunado evento en su vida.
Tras haber recibido el alta, José Daniel, salió de un hospital de Quetzaltenango, Guatemala sin imaginar que sufriría en carne propia de los estragos de la delincuencia.
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Según medios internacionales, el joven se dirigía hacia una farmacia para comprar su medicamentos. En el trayecto José Daniel fue interceptado por unos sujetos quienes no solo lo despojaron de sus pertenencias sino que también lo atacaron.
A través de redes sociales, José Daniel denunció el hecho mostrando la tremenda golpiza que le propinaron.
Joven revela que fue víctima de un asalto por parte de desconocidos en Quetzaltenango.
Los asaltantes le provocaron golpes muy fuertes.
José Daniel se dirigía a una farmacia tras haber salido del hospital tras dar positivo a COVID pic.twitter.com/Inx6Qybyd9
— Fredy Hernández (@FredyHSoy502) September 29, 2021
En la imagen se puede apreciar varios hematomas y uno de sus ojos completamente inflamado tanto así que no podía abrirlo.
“Estuve 25 días internado, tuve que usar oxígeno algunos días. Cuando me dieron de alta, estaba disfrutando de esa caminata como nunca lo había hecho. Iba a comprar algunos medicamentos que me hacían falta, pero dos motoristas se me atraviesan en el camino, se bajan y se fueron directamente a los golpes. La enfermedad me dejó débil y me fui rápido al suelo donde me siguieron golpeando y me quitaron todo lo que llevaba”, contó el joven.
Los criminales querían acabar con su vida. “Tenía una herramienta con forma de T que intentó darme en el estómago, pude agarrarle la mano y el golpe se desvió a la pierna. Me siguieron golpeando, me pegaron en la cara, en el pecho, pero seguía agarrando el arma. ‘Aquí te vas a quedar, aquí te vas a morir’, me decía uno de ellos. Recordar de eso es fuerte”, relató.
Tras los momentos de agonía, el joven logró escapar. “Me pude levantar para correr y grité, pero nadie llegó a ayudar. Uno de ellos me persiguió, pero pude escapar. Cuando él escuchó que estaba gritando, prefirió irse del lugar”, dijo Daniel.