El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, afirmó este martes que enviaría a cárceles de otros países a ciudadanos estadounidenses condenados por crímenes de graves, siempre que fuera legal.
En un discurso en la Casa Blanca, Trump se mostró a favor de esta propuesta para los delincuentes violentos, que tachó de "animales".
"Si tuviéramos derecho legal a hacerlo, lo haría sin dudarlo. No sé si lo tenemos o no. Ahora mismo lo estamos examinando, pero podríamos hacer tratos para sacar a estos animales de nuestro país", afirmó el republicano en la Casa Blanca, donde firmó una serie de decretos y memorandos.
El mandatario no mencionó específicamente a El Salvador, cuyo presidente, Nayib Bukele, anunció este lunes su disposición a recibir en su megacárcel a migrantes indocumentados detenidos por delitos graves en Estados Unidos e incluso abrió la posibilidad de albergar a presos de nacionalidad estadounidense.
Trump argumentó que trasladar a migrantes y ciudadanos condenados por crímenes graves a otros países sería "mucho menos costoso" para Estados Unidos que mantenerlos en sus cárceles y que, además, supondría un "gran elemento disuasorio" para evitar nuevos delitos.
"Podríamos ir un paso más allá. Es decir, estamos hablando de expulsar a los criminales que entran en nuestro país ilegalmente a través de otros países, ¿cierto? ¿Los inmigrantes ilegales, como yo los llamo? Bueno, tenemos personas que son tan malas como ellos en nuestro país; si pudiéramos sacarlos, yo sería muy feliz", afirmó.
Trump utilizó en repetidas ocasiones la palabra "animales" para referirse a quienes enviaría fuera de Estados Unidos, entre ellos, según dijo, aquellos que "empujan a otros a las vías cuando hay un tren que está llegando 40 millas por hora" o los que "golpean en la cabeza a ancianas con un bate de béisbol".
"Francamente, podrían quedárselos, porque esa gente nunca va a ser buena", opinó, dando a entender que no los traería de vuelta, lo que plantea interrogantes sobre los derechos de ciudadanía.
Algunas organizaciones, incluidos expertos del Brennan Center for Justice, han cuestionado la legalidad de enviar a ciudadanos estadounidenses a otros países, ya que, a diferencia de los migrantes, están sujetos a garantías procesales recogidas en la Constitución de Estados Unidos.
Tras reunirse el lunes en El Salvador con Marco Rubio, secretario de Estado, Bukele expuso en redes sociales que ofreció a EE.UU. "externalizar" parte de su sistema penitenciario.
"Estamos dispuestos a admitir únicamente a criminales convictos (incluidos ciudadanos estadounidenses convictos) en nuestra mega prisión (CECOT) a cambio de una tarifa", expresó Bukele en X.
VER: Marco Rubio dice que EE.UU. estudiará problemas legales de envío de presos a El Salvador
Mientras que en una publicación en la misma red la mañana de este martes, el secretario Rubio calificó de "muy productiva" la reunión con el presidente salvadoreño y su ofrecimiento de recibir criminales convictos.

"Su compromiso de aceptar y encarcelar a criminales de cualquier país, incluidos los de pandillas violentas como MS-13 y Tren de Aragua, hará que Estados Unidos sea un país más seguro. En un gesto extraordinario nunca antes ofrecido por ningún país, el presidente Bukele ofreció albergar en sus cárceles a criminales estadounidenses peligrosos, incluidos ciudadanos estadounidenses y residentes legales", dijo Rubio.
No obstante, en su visita a Costa Rica, Rubio habló de la revisión legal de dicho ofrecimiento. "Tenemos una Constitución, tenemos todo tipo de cosas, pero es una oferta muy generosa", agregó el jefe de la diplomacia estadounidense, tras una reunión con el presidente costarricense Rodrigo Chaves.
Bukele ofreció también alojar a cualquier migrante "que sea un criminal de cualquier nacionalidad", como los de la pandilla MS-13 (de El Salvador, Honduras y Guatemala) y el Tren de Aragua de Venezuela.