¿El coronavirus sobrevive al calor?

Hasta el momento el virus ha tenido mayor afectación en países con temperaturas bajas.

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Foto/ AFP

Por N. Hernández / Agencias

2020-03-12 4:36:16

El coronavirus está en más de 100 países y se sigue extendiendo, pero hasta el momento la mayoría de países donde se han reportado casos son zonas que están pasando por el invierno y cuyas temperaturas son bajas. Ante esto, surge la pregunta: ¿cómo se comportará en un clima más cálido?

El COVID-19 pertenece a una familia de virus que suele vivir más en climas fríos y aunque la mayoría de personas solo suelen experimentar síntomas leves o moderados como fiebre y tos, también puede ocasionar afecciones más graves como neumonía en adultos mayores.

Hasta el momento se desconoce cómo si los casos de coronavirus pueden reducir en temperaturas altas, pues es una enfermedad de la que se conoce muy poco, ya que entró en el radar a fines de diciembre.

“Tenemos que asumir que el virus continuará teniendo la capacidad para propagarse, y es una esperanza falsa decir ‘sí, desaparecerá en el verano al igual que la influenza'”, dijo Michael Ryan, director de emergencias de la Organización Mundial de la Salud.

También, para Dale Fisher, consultor en enfermedades infecciones en la Universidad Nacional de Singapur, es poco probable que el calor ayude a reducir significativamente la propagación del coronavirus y que esto puede ocurrir solo después de algunos años cuando ya la mayor parte del mundo esté contagiada porque entonces el virus podría adquirir un patrón similar al de la gripe.

“Dado que no tenemos inmunidad natural a esto, todos somos mucho más vulnerables, sin importar el clima”, explicó.

Un estudio de la Universidad de Maryland establece que el clima podría tener cierta influencia en el comportamiento del virus porque se han observado que en algunas regiones con brote sostenible las temperaturas oscilan entre 5 y 11 grados Celsius que serían entre 41 y 52 grados Fahrenheit.

Comportamientos de virus similares

El nuevo virus está genéticamente relacionado con el síndrome respiratorio agudo grave (SARS, por sus siglas en inglés) y con el síndrome respiratorio por coronavirus de Oriente Medio (MERS, también en inglés). El SARS estalló en China a finales de 2002 y afectó a unas 8.000 personas a nivel mundial antes de que se declarara que había sido contenido en julio de 2003.

No fue el verano el que detuvo al SARS sino medidas extraordinarias como la suspención de viajes de los epicentros en Asia y Canadá, así como el sacrificio masivo de las civetas que transmitieron la enfermedad a los seres humanos.

Lo mismo pasó con el control del MERS, aunque no se ha interrumpido por completo su propagación a humanos desde los camellos, ahora las infecciones son esporádicas y los brotes son limitados desde que fue descubierto en 2002.

“No creo que haya nada que podamos decir sobre el patrón estacional y el coronavirus con base en lo que hemos visto con el SARS y el MERS”, explicó Michael Osterholm, director del Centro de Investigaciones sobre Enfermedades Infecciosas de la Universidad de Minnesota.

En cuanto al coronavirus se debe de tener en cuenta que no ha causado epidemia en el hemisferio sur, pero esto no significa que no llegará al territorio.

Además, se debe de tener en cuenta que los síntomas de este virus son similares a los otras enfermedades como la gripe, el sarampión y la malaria, así que detectar los casos podría ser un poco complicado.

Benjamin Cowling, director de la División de Epidemiología y Bioestadística de la Facultad de Salud Pública en la Universidad de Hong Kong, dijo que sospecha que existen brotes más amplios en países que ya han confirmado casos, como Tailandia y Vietnam.

La mayoría de los países generalmente calurosos, creemos, no han realizado pruebas con la misma agresividad que algunos de los países más fríos”, señaló.

“Es más probable que la gente se quede en interiores durante el clima frío de lo que lo hace durante el verano. Más tiempo en interiores significa que es más probable que la gente esté junta en las mismas habitaciones y por lo tanto se contagie”, agregó.

El experto insistió en decir que las temperaturas más altas probablemente no detendrán por completo la continua propagación del virus, pero se cree que los países más fríos podrían ser los más afectado.