Virginia, la mujer que vive sobre las piedras del volcán Chaparrastique
Las piedras volcánicas del Chaparrastique conforman el suelo de la casa de Virginia, donde vive rodeada de paredes de lámina, duralita y con un volcán activo a sus espaldas que genera temor en ella.

A sus 78 años, Virginia Álvarez vive en una casa donde las paredes son de lámina, duralita y se sostiene con madera, en un terreno de piedra volcánica en las cercanías del Volcán Chaparrastique. Foto EDH/Kellys Portillo 
La Curruncha, donde vive Virginia, es parte del cantón El Borbollón. El terreno es un playón de piedras volcánicas resultado de una erupción del volcán Chaparrastique en 1819, explica el geólogo investigador Francisco Barahona. Foto EDH/Kellys Portillo 
Virginia vive acostumbrada al volcán con sus pollos y patos que la acompañan día con día. Pero el miedo por una posible actividad volcánica mayor, no desaparece. Foto EDH/Kellys Portillo 
Dedicó casi toda su vida al trabajo del hogar remunerado, a pesar de no tener un salario fijo. Ahora, debido a una infección en el estómago, causada por una bacteria, ya no puede trabajar. Foto EDH/Kellys Portillo 
Virginia vive sola. No posee los servicios básicos de una casa como electricidad o agua potable. Para abastecerse de agua, paga $10 cada ocho días y utiliza un par de focos alimentados por un pequeño panel solar. Foto EDH/Kellys Portillo 
Cuando el Chaparrastique entra en actividad, pequeñas piedras y cenizas caen sobre la comunidad. El suelo retumba y las láminas de la casa de Virginia tiemblan. Foto EDH/Kellys Portillo 
Debido a los escasos ingresos económicos que tuvo, nunca pudo acceder a una vivienda digna con espacios adecuados. Foto EDH/Kellys Portillo 
Virginia quiso plasmar los deseos de su cocina ideal en una hoja de papel blanca con recortes de revista, la cual constaría de una mesa limpia, la estufa y ollas brillantes. Foto EDH/Kellys Portillo 
La habitación de Virginia solo consta de una base de madera con un colchón delgado. Rodeada de cartones y demás pertenencias que guarda. Foto EDH/Kellys Portillo 
Mediante unos recortes, Virginia expresa que desearía tener un ventilador, mesa de noche y un estante también en su cuarto. Foto EDH/Kellys Portillo 
El baño de Virginia es de fosa y sin luz. Por las noches le resulta complicado ir por la nula visibilidad que tiene. Foto EDH/Kellys Portillo 
El deseo de Virginia para un baño es poder cambiar su baño de fosa por un retrete más digno para su edad y condiciones. Foto EDH/Kellys Portillo 
Virgina sueña con un hogar adecuado con paredes y techos firmes, y con servicios básicos como agua potable y electricidad. Foto EDH/Kellys Portillo

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