El Parque Cuscatlán recibe a los salvadoreños a partir de este 17 de septiembre

Con una visión inclusiva y una agenda cultural variada, el parque se convierte en un oasis ante la escasez de áreas de sano esparcimiento en la capital.

Por Sara Castro

2019-09-16 5:56:00

Este martes será inaugurado el Parque Cuscatlán, las expectativas se encuentran al máximo. Han pasado casi tres años desde que se colocó la primera piedra, símbolo del inicio de reconstrucción de un parque emblemático de la capital salvadoreña que ahora se materializa con los esfuerzos de la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID, por sus siglas en inglés), Glasswing International, The Howard G. Buffet Foundation y la Alcaldía de San Salvador.

El parque fue ideado como un espacio inclusivo, con la mayor base de beneficiarios posibles, como un catalizador para otros proyectos urbanos, por supuesto, como un oasis ante el clima de inseguridad que viven los salvadoreños. Con esta proyección, los entes impulsores crearon un campo de total esparcimiento, donde la cultura, el deporte y la seguridad estén garantizados.

De acuerdo con el director de Desarrollo Municipal de la Alcaldía de San Salvador, Juan Carlos Montes, la inversión para la construcción de este espacio sobrepasó los 19 millones de dólares. Y al recorrer cada rincón del Parque Cuscatlán es notable la minuciosidad con la que fue visionado: bancas o mesas que incluyen toma corrientes y puertos USB, puntos de wifi, abrevaderos para mascotas, salones para arte, área de exposiciones, una concha acústica, pasarelas aéreas que atraviesan el parque y acortan el camino de transeúntes que deben desplazarse de la Sexta décima calle Poniente a la Alameda Roosevelt.

Foto EDH/ Jessica Orellana

El artífice del diseño del parque fue el arquitecto colombiano Felipe Uribe, quien diseñó una intervención respetuosa de la naturaleza ya existente. Por ello, mucha de la construcción se ha adaptado a la posición original de los árboles.

Otros especímenes se han trasladado, todo con el objetivo de conservar el verdor de este parque urbano.

Además, se sembraron más de un centenar de árboles de especies diversas para que el paisajismo fuera frondoso, el clima fresco y se complementara con una arquitectura minimalista, un espacio de descanso y verdor, enclavado en la agitada y estruendosa ciudad.

“Este es un reconocidísimo pulmón y vale la pena cuidarlo. Un parque es un elemento urbano. Hablamos de la vida de las ciudades. No es algo que dura tres años, es algo que puede durar siglos, si lo cuidamos”, indicó la coordinadora de Espacios Públicos de Glasswing International, Mayu Ferrufino.

Y frente a la innegable importancia de este centro de esparcimiento, todos los involucrados hacen un urgente llamado a la población para el cuido y respeto de cada área, pues este parque reunirá zonas para los amantes del ciclismo, las caminatas, para quienes quieran realizar yoga o aeróbicos, los interesados en exposiciones de arte y conciertos, para quienes quieran jugar fútbol o básquetbol.

Foto EDH/Jessica Orellana

“Les diría a los salvadoreños que este parque es totalmente de ellos, que lo cuiden como algo querido de sus hogares. Este parque no puede sobrevivir sin la colaboración de los salvadoreños”, recalcó Ana Rosa Selva, representante de USAID.

Pero el cuidado y mantenimiento de estas áreas también representará un trabajo significativo para la municipalidad. Según Montes, habrá un equipo de más de 100 personas que garantizará la limpieza, el cuido de zonas verdes, el mantenimiento del sistema eléctrico; así como 25 agentes del Cuerpo de Agentes Metropolitanos (CAM) que supervisarán y resguardarán de este campo.

Con este extraordinario proyecto, Selva considera que es un punto de partida para que se replique en otros municipios y para que los salvadoreños “salgan a disfrutar de El Salvador y exijan a sus líderes más espacios como este”.

GALERÍA DE FOTOS:

Así luce el renovado parque Cuscatlán que abre sus puertas a partir de este martes

A partir de ese día todos los visitantes podrán disfrutar de los diferentes atractivos con los que el espacio público inicia su nueva etapa de vida.