En la década de los 90 e incluso en la de 2000 la música nacional reinaba en El Salvador, las bandas nacionales eran de las más cotizadas, siempre reunían a miles de personas en un solo lugar con el objetivo de disfrutar de la música hecha en casa.
La Pita Vieja fue una de esas bandas que recorrió por las noches todo establecimiento de moda, sus fans la recuerdan como una de las mejores y sigue siendo una de las más recordadas.
En una entrevista con elsalvador.com, su actual vocalista, Efra López, habló del retorno a los escenarios del conjunto y de su intención de ingresar al estudio de grabación.
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¿Hace cuánto no se reúne la alineación original de La Pita Vieja y cuál es el motivo de su reencuentro?
La banda decidió tomar un descanso hace casi 11 años (2010), esta etapa fue terminada con la alineación de siempre: Carlos Melgar (batería), Eduardo Vega (bajo), Jorge Sandoval (teclado), René Figueroa (guitarra) y Marcelo Avilés (voz). Yo había ya abandonado el proyecto en el 2007.
El motivo es celebrar la vida, salud, amistad, hacerlo con lo mejor que podemos hacer: música. Venimos de una crisis de salud mundial y creemos que es una buena oportunidad de juntar talentos, esfuerzos y regresar a nuestro público un poco de alegría a través de la música.
Para ustedes ¿cuál fue el mejor momento de la agrupación a nivel musical?
Todo el proceso de creación, grabación y producción de nuestro primer y único disco (Escucha el icónico álbum de La Pita Vieja, haz clic en: "Con la tierra en los pies") —por el momento—, que contaba con temas escritos por nosotros mismos. Hay muchos más momentos especiales e inolvidables, pero creo que todo este proceso (en medio de terremotos, visitas a radios, medios escritos, canales de televisión, la aparición de nuevas bandas incluso activas al día de hoy, nuevos talentos, aparición del mp3, el principio del fin del CD, etc.) fue el que encerró muchos de esos momentos llenos de satisfacción profesional para todos.
¿Junto a qué otras bandas se codearon en su época de auge?
Iniciamos y crecimos admirando a Fugga, referente no solo para nosotros, sino para la mayoría de bandas de aquel entonces. Pero tuvimos la oportunidad de tocar en los mismos escenarios de las bandas que ahora son referencia de la música salvadoreña, algunas aún vigentes y exitosas como Los R.E.D.D., Álex Oviedo, (nunca tuvimos oportunidad de tocar con Prueba, pero nos hubiera gustado), Extremos Unidos, Sureste (bandas ya extintas). Muchos músicos que al día de hoy gozan de una gran aceptación y que dejaron su huella en la música salvadoreña.
¿Cómo describirían los conciertos de esa época?
En ese entonces, para escuchar en vivo los éxitos de tus bandas favoritas la gente buscaba los bares y vivir esa experiencia de escuchar las bandas en vivo, internet era algo nuevo y no al alcance de todos (no había ni YouTube), ahora podés disfrutar de tu artista favorito en vivo desde la comodidad de tu hogar. Existía el concepto noventero de “La banda del bar”, semanalmente muchas bandas teníamos nuestros espacios para desenvolvernos y darle un espectáculo musical a los clientes de dichos lugares, por lo que nos las ingeniábamos para tocar los éxitos que en ese momento sonaban en la radio, lo que estaba de moda.
Preparar los “Especiales” (este era término nuevo) de uno o dos artistas en particular; hacer arreglos de música tropical al estilo rock (esto lo hicimos con La Pita antes que otras bandas grabaran y los hicieran éxitos), tocar nuestras canciones del disco… en fin, nos rebuscábamos por mantener nuestro público cautivo y fiel y que los lugares nos contrataran.
Otras bandas lograron hacer lo que en aquel entonces solo el mercado tropical hacía: salir a escenarios grandes al interior del país, grandes festivales, cabalgatas… en esa época nos hubiera encantado hacerlo, pero ya que todos trabajábamos en empresas privadas, no pudimos involucrarnos.
¿Qué le dirían a todos aquellos que conocen bien su propuesta musical y están pendientes de su retorno?
Que es gracias a sus constantes peticiones de hacer esta reunión musical que haremos un par de presentaciones formales en las que esperamos llenar las expectativas con las canciones que siempre cantamos y un par de sorpresas más.
¿Qué es lo que más extrañan de tocar juntos?
El cariño y aceptación del público, creo que teníamos el carisma de involucrarnos con quienes llegaban a escucharnos.
Ya tenían una amplia trayectoria, ¿por qué se alejaron de los escenarios?
Por proyectos personales (siempre relacionados con la música algunos), familia, salud… en algún momento la mayoría estuvo tocando con otras bandas o formando las nuestras, en el caso de Marcelo y mío también con carreras como solistas.
¿Cómo ven la industria musical salvadoreña actual?
En lo personal, siento que no hay industria musical, en el caso de la música salvadoreña existió allá por los años 60 o 70, en el género tropical en los 80, 90. De cierta forma estaban más y mejor organizados. Nosotros entramos a promocionar, junto a Sureste y otras bandas de la época, nuestras canciones en la radio y el género urbano ya comenzaba a sonar con sus grandes exponentes, no tuvimos representantes, ni director, nuestros discos fueron grabados y producidos por nosotros mismos con nuestro dinero.
Al llegar a las radios (no en todas) con el material terminaba literalmente en el cesto de la basura porque no sonábamos como un artista que venía de fuera. La historia no cambia en la actualidad, reconozco que hay grandes nuevos talentos, pero no hay una entidad que le apueste a hacerles crecer como industria, como una marca. Creo que la escena salvadoreña del 2000 para acá ha sobrevivido gracias a medios de comunicación como ustedes, algunas radios que confiaron, directores de radio como Henry Zavaleta (Radio Super Stereo), héroes anónimos que se dedicaron a recopilar materiales. Con la aparición de YouTube y plataformas de descarga musical se mantuvieron vivas las canciones, fotografías y las bandas de aquellos años.
¿Cuál ha sido el mayor cambio en la banda desde sus inicios hasta la actualidad?
El mayor cambio es que todo lo hacemos enfocados en el crecimiento profesional de la banda, en los inicios esto era un hobbie, incluso los mejores momentos de la banda eran sobre todo por diversión. La visión común al día de hoy es hacer las cosas más profesionales, por respeto al cariño del público y a la escena musical del país.
¿Cómo se sienten de estar nuevamente sobre el escenario?
De todos, en estos 11 años, solo fue René Figueroa quien se tomó un verdadero descanso del escenario y aprovechó para consagrarse como poeta y fotógrafo profesional, cosechando grandes logros dentro y fuera de nuestro país. Jorge (teclados) siguió en su ministerio de alabanza y con bandas salvadoreñas; Marcelo (voz) en su profesión, cantante y fundador de STEIN (banda hermana) y como comediante. Carlos, Eduardo y yo formamos en 2012 la banda TRES AM (actualmente en receso), solo puedo decir que estamos ansiosos de regresar y poner todos estos recursos y experiencias adquiridas en escena y que nuestros fans revivan buenos momentos de La Pita Vieja, los lugares que visitábamos y las canciones de cantábamos.
¿Piensan llevar a cabo algún nuevo proyecto?
Sí, nuevas grabaciones, temas por los que ya empezamos a reunirnos de forma virtual para coordinar.