El príncipe Harry y Meghan Markle presentaron una demanda en California (EE. UU.) acusando a unos paparazzi no identificados de tomar fotografías ilegales con un dron a su hijo Archie.
La demanda presentada el pasado jueves alega “intrusiones en serie” en la privacidad de Archie, de 14 meses de edad, en la casa de Los Ángeles donde Harry y Meghan viven desde marzo.
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La pareja dice que está tomando medidas legales para proteger al pequeño de un “frenesí de alimentación manufacturada” después de afirmar que los fotógrafos habían volado helicópteros sobre su casa y habían cortado agujeros en una cerca para tomar fotos.
También acusaron a los fotógrafos de poner historias engañosas en las fotos donde Archie aparece en su jardín trasero para sugerir que fueron tomadas en otra parte.
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“El duque y la duquesa de Sussex están presentando esta demanda para proteger el derecho a la privacidad de su hijo pequeño en su hogar sin la intrusión de los fotógrafos, y para descubrir y detener a aquellos que buscan beneficiarse de estas acciones ilegales”, expresó el abogado de la pareja.
De acuerdo al Daily Mail, en la demanda se destaca que la célebre pareja tomó medidas de privacidad en su mansión, como la construcción de una gran cerca de malla alrededor de la propiedad para protegerse contra los teleobjetivos.
Pero no pueden protegerse contra los drones que vuelan “a solo 20 pies sobre la casa… cerca de tres veces al día”. Los helicópteros también han volado sobre la residencia desde las 5:30 a.m. hasta las 7:00 p.m., según los documentos legales, y despiertan “a los vecinos y a su hijo, día tras día”.