El Palacio de Buckingham negó que estuviera detrás de la orden para que se borrara el nombre de pila de Meghan Markle del certificado de nacimiento de su hijo Archie, un mes después de su nacimiento.
“Rachel Meghan” fue eliminado del documento para dejar solo “su Alteza Real la Duquesa de Sussex”, título que forma parte del protocolo. Ambas partes se culpan entre sí, pero la casa Real culpa al equipo de relaciones públicas de la pareja (Harry y Meghan) con sede en Los Ángeles.
El Palacio de Buckingham se ha negado a comentar, pero una fuente del Daily Mail dijo que fueron los propios ayudantes del príncipe Harry y Meghan en el Palacio de Kensington quienes hicieron los cambios, y que la decisión no tenía nada que ver con la reina o su personal.
Se dice que el certificado fue cambiado por la antigua oficina del duque y la duquesa de Sussex. Y que la alteración se dio para “garantizar la coherencia del nombre y el título de la duquesa con otros documentos privados”, dijo una fuente a MailOnline.
Otra fuente explicó a The Telegraph que el equipo de medios de los Sussex en Estados Unidos había cometido un error y sugirió que algo se había “perdido en la traducción”.
El mismo informante anónimo comentó que en la declaración se plantearon más preguntas que respuestas y se llegó a la conclusión de que el “dictado” fue desafortunado. Por su parte, en el palacio aseguran ser inocentes, alegan que “estos son documentos civiles, no hay protocolo”.
El hijo de Harry y Meghan, Archie, nació el 6 de mayo de 2019 y el nacimiento se registró el 17 de mayo. El cambio de nombre se realizó el 5 de junio, pero recién ahora ha salido a la luz esta inexplicable alteración.
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La revelación de la omisión del nombre de pila surgió en el periódico británico The Sun el pasado domingo, la noticia sorprendió a muchas personas de la realeza y provocó especulaciones iniciales sobre la razón por la que Meghan y su esposo hicieron el cambio en junio de 2019.
The Sun publicó que ella fue quien solicitó que quitaran su nombre, sin embargo, la duquesa desmintió esta versión. El equipo de relaciones públicas de Harry y Meghan en Estados Unidos declaró que la orden fue “dictada por el Palacio” en un ataque a la prensa británica.
“Esto no fue solicitado por Meghan, la duquesa de Sussex, ni por el duque de Sussex (el príncipe Harry)”, reiteró.
El portavoz criticó a los periódicos “y su carnaval de supuestos expertos” y dijo que la destitución del “Rachel Meghan” “fue dictada por el Palacio, según lo confirmado por documentos de altos funcionarios del palacio. Esto no fue pedido por Meghan, la duquesa de Sussex, ni por el duque de Sussex”.
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Al comienzo algunos pensaron que Meghan quitó sus nombres del acta de nacimiento de Archie como un desprecio para desligarse de los duques de Cambridge, ya que en los certificados de sus tres hijos, Kate Middleton siempre incluyó su nombre de pila.
Hasta el momento no se ha llegado a una conclusión, la prensa rosa está a la espera de más declaraciones.