Kim Kardashian y Kanye West finalmente se reunieron luego de que ambos emitieran una serie de declaraciones que no solo develaron una crisis matrimonial, sino también el delicado problema de salud mental que padece el rapero.
La cereza del pastel fue la acusación que el rapero hizo a la socialité en plena rueda prensa tras presentar su primer acto de campaña política, cuando dijo que ella quiso abortar a su primogénita.
Tras todo el escándalo, la pareja finalmente se reunió en Cody, una ciudad de Wyoming. Como era de esperar el momento tuvo toda la atención mediática y captaron un incómodo momento entre la pareja.
Previo al drama, se había visto a Kim muy inmersa en sus celulares. Se podía observar también que ambos eran capaces de sostener una conversación normal.
Pero momentos después la expresión de Kim cambió estrepitosamente. Su rostro revelaba tristeza y frustración tras hablar con Kanye. Ella estaba “muerta en llanto”.