Nació en la ciudad portuaria de La Unión, el 22 de junio de 1893. Realizó sus estudios básicos en el Colegio de Oriente, en Santiago de María, departamento de Usulután. Los de bachillerato los efectuó en el Instituto Nacional de San Salvador.
Su primer poema le fue publicado en Diario Latino (San Salvador), el 20 de febrero de 1908. Entre 1909 y 1928, publicó más versos y artículos en Vox Populi, Diario del Salvador, El Diarito, el diario migueleño La Noticia, El día, Patria y más.
En la segunda parte de su texto Nuestros ricos y nuestros gatos (publicada en el diario sansalvadoreño El día y reproducida en la revista Repertorio americano, San José, Costa Rica, tomo V, no. 26, 12 de marzo de 1923, págs. 343-344), el también poeta y periodista Alberto Masferrer le dedicó una opinión personal a su entonces amigo:
“Ya se sabe quién es él: poeta, de los cuatro o cinco que en Centro América pueden recibir ese nombre sin caer en pecado de tarasconismo; patriota, sin sombra de codicia ni de ambición; ilustrado, porque no deja nunca de estudiar en las cosas y en los libros; escritor, de los pocos que sienten que la pluma es sagrada, y que la inteligencia se oscurece si no anda a la par con la vida sencilla y honrada; creyente en el bien, hombre de ideas y de ideales, tolerante con todo, exigente consigo mismo (…)”.
Aún no se ha escrito la historia de la fotografía en nuestro país. Cuando esa obra se haga, en ella el alemán Fassold tendrá un lugar destacado, sin duda alguna.
Entre julio de 1928 y febrero de 1930, las desaveniencias personales entre Rey Solares y Masferrer crecieron y se produjo una ruptura inzanjable.
A juicio del joven poeta, recopilador y editor salvadoreño Vladimir Amaya, Rey Solares fue un “modernista de tono menor, pero muy suelto e imaginativo. De los periodistas que se animaron a escribir poesía en su época, fue uno de los más interesantes, pero lastimosamente hubo otros quehaceres que le quitaron tiempo al poeta para perfeccionarse en el arte de la poesía. Intuición y musicalidad, las tenía, como también oído para el corte de versos. Animador del Modernismo en el país en la segunda década del siglo XX. Su poesía fue fiel reflejo de un espíritu culto y amplio”.