Alianza aprovechó la condición de local para dar un paso importante hacia los cuartos de final de la Liga Concacaf, luego de lograr derrotar (2-0) al Tauro, en la ida de los octavos. Con esto, los panameños están obligados a ganar por diferencia de tres para remontar, el jueves en ciudad Panamá.
Previo a este compromiso, el técnico de Tauro, Saúl Maldonado dijo que vendrían a El Salvador tomando algunas precauciones. Pero prácticamente fueron muchas las que presentaron contra Alianza, que pareció ganarles el respeto con la forma en la que superaron al otro equipo panameño, en la fase previa, San Francisco (6-1, en el global).
Los panameños, con un 4-4-1-1, prácticamente se dedicaron a esperar a los albos y cada vez que pudieron, trataron de perder todos los segundos que fueran necesarios para intentar salir con vida del Monumental. En ataque generaron muy poco, producto de algún contragolpe o jugada a balón parado, que fue como llegaron algunas veces hasta la portería de Víctor García.
Por su parte, Alianza mantuvo su idea con el 4-4-2, con la variante por la banda derecha de Herlbert Soto en lugar de Óscar Cerén.
Los blancos tuvieron control del partido, en base al dominio de balón y los movimientos sin pelota, para abrirse espacios y generar ocasiones de peligro, en las cuales faltó un poco de mayor tranquilidad para hacer la definición e irse ganando en el primer tiempo con una mayor ventaja que la de un gol.
Pues antes de la anotación del colombiano Raúl Peñaranda, este mismo no pudo contra el portero panameño Humberto Acevedo, cuando quedó en solitario contra él y se las dejó en la manos (11’). Luego, Marvin Monterroza hizo que muchos aficionados gritaran gol, después de un tiro libre con el que la pelota pasó rosando el poste y la red con el que muchos terminaron engañados y lamentando la ocasión (35’). Después, Diego Ascencio, tras un centro por la izquierda, no pudo darle dirección a un cabezazo que conectó de frente y dejo en las manos de Acevedo, quien hasta agradeció por esta ocasión fallida (35’).
La cuarta fue la de la vencida para los albos, con la conexión colombiana entre Soto, quien recibió en profundidad para asistir a Peñaranda, quien definió de cabeza (37’), desatando la locura de los aficionados paquidermos, que llegó en un buen número, pero no en el esperado.
Pudieron ser más
De parte del Tauro hubo un cambio de hombre por hombre, tratando de dejar a dos en punta para lograr el tan ansiado gol de visitante. Pero fue lo más que intentó arriesgar el técnico taurino, que atrás seguía encerrado para evitar salir goleado de este escenario.
Alianza lo intentó en dos ocasiones, pero a Juan Carlos Portillo le faltó precisión para asistir a los delanteros, con pases cortos.
Un tiro de esquina se convirtió en la herramienta perfecta para encontrar la segunda anotación, con el cobro de Monterroza, por izquierda, buscando por el primer poste a Iván Mancía, quien de cabeza dejó sin chance de reacción a la zona baja de los panameños (56’).
Pero la alegría, tuvo un momento de interrupción, ante la preocupación que vivieron los dos equipos, en una jugada donde el portero albo, Rafael García sufrió un corte en la cabeza, y el delantero panameño, Jair Catuy dejó el estadio hacia el hospital, resentido de su hombro (64’).
Fue un trago amargo para los dos, pero el partido terminó dentro de lo normal, con Alianza estando más cerca del tercero, que los del Tauro acercándose al empate.
El sin sabor se generó con las ocasiones que Cabrita Portillo no pudo aprovechar, ni tampoco el Puma Peña, quien había llegado para el último cuarto del partido. Pero la satisfacción estaba, para que el “Como no te voy a querer” sonara por todo lo alto, mismo que se mantendrá para la visita del jueves a Panamá, para el partido de vuelta.