Laguna de Ahuachapán “es una cloaca”, dijo presidente de Fonaes

El presidente de Fonaes se compromete a rescatar la laguna, en coordinación con la comuna.

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Según un estudio de la municipalidad de Ahuachapán, en la laguna se descargan 37,000 metros cúbicos de aguas grises al año, lo que equivale a 4,625 cisternas. Foto EDH / Cristian Diaz

Por Cristian Díaz

2019-06-24 10:20:23

AHUACHAPÁN. El presidente del Fondo Ambiental de El Salvador (Fonaes), Jorge Aguilar, declaró que la laguna El Espino, en Ahuachapán, “prácticamente es una cloaca” y que “sin tener que haber hecho un análisis esto tiene un serio problema de contaminación”.

Esto tras realizar, el jueves pasado, un recorrido para constatar la situación de este cuerpo de agua, que recibe desechos sólidos y las aguas grises que vierten los 3,126 hogares que se ubican a su alrededor.

Aguilar realizó el recorrido junto al alcalde, Abilio Flores, y el coordinador de la Unidad Ambiental y Servicios Públicos de la comuna, Marlon Brito.

“Hemos invitado a la unidad de Medio Ambiente de Ahuachapán para que, a través de Fonaes , asesorarlos sobre (…) cuál puede ser la salida más viable para ejecutarla a la brevedad posible (…) ya es prácticamente una cloaca esa laguna de El Espino; vamos a hacer hasta lo imposible por rescatarla”, expresó Aguilar.

La preocupación por el rescate de la laguna ha aumentado luego que El Diario de Hoy hizo una publicación, el 28 de mayo, donde se expuso el problema ambiental.

El reportaje tiene como base el estudio “La contaminación de los asentamientos urbanos precarios”, hecho por la municipalidad.

De acuerdo con el documento municipal la acumulación de nutrientes de origen biológico y químicos en el agua, provenientes de la agricultura y las aguas grises, acelera la eutrofización, que es el proceso de contaminación más importante de las aguas y que consiste en la proliferación descontrolada de cianobacterias (algas del tipo fitoplanctónicas).

Estos “organismos, que consumen gran cantidad de oxígeno, se alimentan de fosfatos y CO2 a través de la fotosíntesis y generan un amplio espectro de toxinas que envenenan a los demás seres que habitan el mismo ambiente o consumen el agua”, expone el estudio.

La laguna está en una etapa de degradación reversible; pero que de no tomarse acciones podría convertirse en “una gran cloaca que genera malos olores, proliferación de insectos, vectores de enfermedades respiratorias y gastrointestinales”.

El Juzgado Ambiental de Santa Ana también ha programado realizar una inspección en la laguna el próximo 29 de julio, tras la publicación.

“Uno de los problemas más críticos que tiene es que todas las comunidades, tristemente, sus aguas grises desembocan en dicha laguna; además de que las personas llegan a tirar la basura. Lo preocupante de esto es que encontramos perritos tomando agua, ganado bebiendo agua de la laguna, hay varias familias que se dedican a la pesca, así como hay una industria de tilapia que también se alimenta de este tipo de agua y, definitivamente, sin tener que haber hecho un análisis esto tiene un serio problema de contaminación”, expresó Aguilar.

El coordinador de la Unidad Ambiental y Servicios Públicos de la comuna, Marlon Brito, expresó que el problema que enfrenta la laguna aún es reversible, por lo que al empezar a corregir se puede recuperar en 10 años. En otra oportunidad reconoció que si no se interviene en 5 años podría convertirse en una cloaca.

Además señaló, tras el recorrido con el presidente de Fonaes, que antes de dos semanas van a presentar un proyecto piloto donde darán prioridad a la instalación de al menos 500 biofiltros y una bioplanta de tratamiento. También a la conformación de 15 comités ambientales y la creación de la Fundación Laguna El Espino.

La laguna tiene una extensión de 0.9 kilómetros cuadrados y su forma es la de un cráter; además sus aguas provienen de la precipitación o la lluvia.

Hace 2 años, la alcaldía colocó dos trampas que sirven para evitar que dichos desechos lleguen hasta la laguna cuando llueve.

Al año logran evitar que al menos 100 toneladas de basura vayan a parar al lugar, pues quedan en dichas trampas y recolectadas posteriormente. Sin embargo, otra parte sí termina en el agua.

El estudio consigna que la laguna, recibiendo un manejo sustentable, debería ser la reserva estratégica de agua potable del municipio.

Utilizando dos tercios de su volumen podría abastecer aproximadamente a 8,300 hogares por año y también podrían ocuparse 1,000,000 de metros cúbicos para riego por goteo y regar hasta 1,600 hectáreas, entre otros beneficios, explicaron.