LA UNIÓN. Al menos 175 trabajadores de la empresa atunera del Grupo Calvo fueron atendidos de emergencia el pasado 18 de febrero, tras presentar síntomas de una posible intoxicación alimentaria, luego de haber ingerido los respectivos alimentos que les suministra la empresa que ha subcontratado la atunera.
El Grupo Calvo tiene su plantas en el puerto de la Corporación Salvadoreña de Inversión Social (CORSAÍN).
De acuerdo con los afectados, en menos de 15 a 20 minutos de haber ingerido la comida, empezaron con vómitos, diarreas y fiebre. Algunos fueron atendidos en la clínica empresarial de la empresa, otros llevados al Seguro Social y al hospital nacional de la localidad.
El Grupo Calvo confirmó a El Diario de Hoy que fueron un total de 175 los colaboradores afectados, quienes presentaron síntomas de vómitos, diarrea y otros con fiebre.
De inmediato activaron el protocolo de atención médica e informaron a las autoridades correspondientes, hicieron inspecciones en la cafetería para tomar muestras de los alimentos para hacer los análisis en el laboratorio de calidad que tienen en la planta.
Agregaron que continúan investigando la situación, “ya que los resultados tomados por nuestro laboratorio de calidad y los del Ministerio de Salud, no detectaron alimentos contaminados o en mal estado.
“Hemos pedido a la compañía que nos provee de este servicio que se redoble las medidas de manipulación de alimentos para evitar una situación similar”, agregó un miembro del Grupo Calvo.
El personal que labora en las diferentes áreas de la planta gozan del beneficio de la alimentación, para lo cual han subcontratado a una empresa para que preste dichos servicios, a quienes han pedido una investigación minuciosa de lo sucedido para que tomen medidas contundentes y evitar futuras situaciones como la ocurrida.
Grupo Calvo detalló que han acordado con la empresa que les provee los alimentos, tomar medidas adicionales, entre las cuales están redoblar esfuerzos para garantizar la eficiencia en la cadena de frío al transportar los alimentos, garantizar esa misma cadena mediante la toma de muestras de temperatura en origen y destino por parte del proveedor, lo que será reportado a las áreas de calidad.
Además, intensificar el plan de auditorías periódicas en el área de cafetería, en donde se toman muestras para asegurar la calidad e inocuidad de los alimentos y servicios, así como el orden y limpieza del lugar.
Por su parte, el doctor Sergio Zelayandía, gerente del Sistema Básico de Salud Integral (SIBASI) de La Unión, confirmó que fueron atendidos al menos 85 personas que presentaron problemas de posible intoxicación alimentaria.
Agregó que tomaron muestras de los alimentos que tenían en existencia para hacer los respectivos análisis y que el estudio sigue en proceso, “cuatro fueron hospitalizados y uno de reingreso”, agregó.