La Selección de El Salvador intentará salir viva esta noche de la gélida Columbus, en un escenario prácticamente inédito en su historia por eliminatorias mundialistas, en auténtica “final” frente a una Estados Unidos que luce muy alejada de sus complejos con los que inició la octagonal y que busca una victoria que lo acerque a Qatar 2022.
Visto también de otra forma, la Selecta necesita lo imposible para resucitar y seguir confiando en sus opciones de clasificarse para el próximo Mundial: puntuar por primera vez desde 1989 en suelo yanqui y romper con una maldición que ya la tiene con 14 derrotas consecutivas como visitante ante las “barras y las estrellas” en toda competición.
La Selecta recibe charla de un campeón del mundo previo al juego ante Estados Unidos
De hecho, El Salvador no sabe qué es sumar como visitante en una fase final de eliminatoria de Concacaf desde ese 5 de noviembre de hace ya 32 años, cuando empató sin goles ante los mismos norteamericanos en Hartford, Connecticut, y tampoco gana fuera de casa en esta instancia desde 1981, cuando un triunfo por la mínima ante Haití en Tegucigalpa le puso en España 82.
Para lograr un resultado como tal, la Azul pisará el blanco césped del Lower.com Field de Columbus, en Ohio, cuya ubicación próxima al noreste de Estados Unidos le ha sometido en los últimos días a temperaturas que rondan los -13 grados centígrados. Esta noche, al momento del partido, si bien se espera ya solo -1°C, la probabilidad de nieve aumentará del 1 al 18 por ciento.
l El Salvador reconoció el @LowerFieldCbus con una temperatura de -9 para su compromiso ante @USMNT #ElSalvador pic.twitter.com/5NuDMlMIPt
— La Selecta (@LaSelecta_SLV) January 27, 2022
Los mismos jugadores salvadoreños, la mitad oriundos de la Primera División nacional y más acostumbrados a jugar sobre los 30° C, han manifestado sus complicaciones para desempeñarse en este ambiente, al cual han tratado de acoplarse desde hace una semana en su escala en Indianápolis.
“Uno como profesional tiene que adaptarse lo más rápido posible, sabemos que el clima está complicado para ambas selecciones. Nos estamos adecuando con la diferencia de cómo golpear el balón”, aseguró este lunes el defensa Bryan Tamacas, antes de viajar a Columbus.
Las bajas
Todas estas condiciones parecen mejor llevadas por una selección de Estados Unidos de mayor experiencia, pese a su juventud, y que en 2013 ya derrotó bajo la nieve a Costa Rica (1-0) por eliminatorias.
Eso sí, ni el equipo dirigido por Gregg Berhalter logró evitar las bajas para este compromiso, pues el portero Zack Steffen, del Manchester City, no se sumó al grupo debido a lesión, aseguró el técnico estadounidense, que ayer esperaba al defensa DeAndre Yedlin por un retraso en su viaje desde Estambul.
Sin el arquero con el que encaró sus últimos dos partidos de la octagonal, Berhalter apostaría en la titular por Matt Turner, guardián del New England Revolution. Sin Yedlin, daría entrada a Sergiño Dest en el lateral derecho, pese a que no viene jugando con el Barcelona y a que sufrió enfrentando a El Salvador en la primera vuelta.
Pero las bajas en el cuadro azul son todavía más importantes y casi de última hora, encabezando con el mediocampista Marvin Monterroza. El capitán de Alianza dio positivo este domingo por covid-19, informó ayer el doctor del equipo Heriberto Guerrero, y se encuentra aislado, siendo la segunda baja de esta índole tras Christian Martínez, quien ni siquiera realizó el viaje.
En defensa, se mira difícil la inclusión del central Eriq Zavaleta, por una herida en un pie, y junto a Ronald Rodríguez, por causas no especificadas, obligarán una vez más a remover la defensa estelar. También está en duda la participación del portero titular Mario González, quien reportó algunos síntomas gripales esta semana.