Mario González, portero de la Selección Nacional, volvió este domingo por la noche al país junto con sus compañeros procedentes de Estados Unidos, tras disputar una Copa Oro que despertó nuevamente emociones positivas y mucho optimismo en parte de la afición de cara al final de la eliminatoria mundialista rumbo a Qatar 2022.
González, quien se incorpora hoy a su equipo, Alianza, repasa con igual positivismo el futuro cercano de la Selecta. Incluso deja entrever como se ha terminado de conformar el grupo en torno a la idea futbolística de Hugo Pérez, alrededor de una ilusión por lograr éxitos para el país y en contra de las críticas que aún afloran en parte de la afición en determinados momentos.
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Hoy que ya estás en casa y ya en frío, ¿cómo evalúas la Copa Oro que realizaste con tus compañeros?
Fue un torneo muy bueno, independientemente de que perdimos contra Qatar. La Selección funcionó muy bien y aunque no estamos satisfechos, vamos por buen camino. Trabajando así podemos lograr algo para sentirnos orgullosos. Ahora viene lo más importante (la octagonal). Este torneo nos iba a medir cómo estábamos para enfrentarnos a selecciones más fuertes.
Te escucho a ti y a tus compañeros y al técnico y ninguno fue conformista siquiera con el resultado en cuartos...
Teníamos la ilusión de avanzar a semis. Habíamos hecho partidos muy buenos y pudimos haberlo conseguido. Mejoramos en el segundo tiempo (contra Qatar) pero no nos alcanzó el tiempo. Nos quedó ese sinsabor por no haber conseguido el boleto a semis, pero también una buena sensación por el torneo.
¿Cuál crees que fue la clave en esos partidos, todos en los que terminaron arrinconando al rival y aún con energía de buscar un mejor resultado?
La clave fue mantener nuestro estilo y modelo de juego, y la posesión del balón. Con Qatar no tuvimos la pelota al inicio pero luego tuvimos la oportunidad de marcar. Mantener el orden es importante.
¿Cuánto incidió el trabajo del cuerpo técnico en ese sentido?
Por ahí se está haciendo un trabajo increíble, todo el cuerpo técnico es muy profesional. Trabajamos con mucha intensidad. Esos triples turnos al día nos han servido para recuperar la parte física, para que el equipo no se caiga y terminemos corriendo los partidos.
Hugo Pérez les transmitió un estilo de juego. Para ti, ¿este estilo es negociable, dependiendo del rival?
Lo de nosotros es la posesión. Por ahí hay equipos que se nos metieron atrás y es complicado. Cuando se abre un espacio, se abre una oportunidad, pero hay que mantener nuestra idea de juego... Se nos ha pedido mantener siempre el esquema que se nos ha dado. Si eso se cambia, la decisión es de los entrenadores.
¿Qué tan lejos sientes que está el nivel de esta Selección al que están mostrando sus clubes, a los que ya volverán esta semana?
El nivel más alto es la Selección. La Liga es competitiva entre nosotros, pero luego nos cuesta adaptarnos al ritmo de equipos de otros países. Sin embargo, en los partidos que hemos jugado, nos hemos puesto de tú a tú con equipos muy fuertes. El mensaje general, al terminar la Copa, fue que tratáramos de ser los mejores en nuestros clubes y hacer trabajos extra para volver en buen ritmo a la Selección.
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La mayoría de los seleccionados convivieron en gira más de un mes. ¿Ayudó eso a reforzar el grupo?
Más allá de ser buenos compañeros, el ambiente es como de una familia. El camerino es bastante sano, mantenemos una unión. A la hora de luchar, luchamos todos e independientemente de quién juegue.
¿Sirvió eso también para lidiar con las críticas?
Como profesionales, sabemos del medio en que estamos. Siempre lo hablamos y tratamos de revertirlo para motivarnos aún más. La gente afuera no sabe todo lo que uno trabaja y lo que se vive antes del partido. Eso lo afrontamos de buena forma y se apoya al compañero.
¿Los jugadores son conscientes de la ilusión que la Selección ha despertado nuevamente con la afición?
Sí, y no solo la afición, sino que nosotros también estamos con esa ilusión de marcar un precedente y lograr algo que en mucho tiempo no se ha conseguido para el país.
Para algunos seguidores ha sido nuevo ver en la selección a un grupo de salvadoreños nacidos fuera del país. ¿Cómo vivieron ustedes esa integración como futbolistas?
Es bienvenido quien va a brindar toda su capacidad a la Selección. Es una cultura diferente, como dices, pero nosotros aprendemos de ellos, así como ellos también han aprendido de nosotros. Eso hace a un equipo y a un camerino mucho más sólidos para este tipo de compromisos.
