Soñar no cuesta nada, aunque tratándose de motociclismo, esos sueños llevan adrenalina y velocidad máxima. Sin embargo, lo de Kevin Olmedo está lejos de ser un sueño y se ha transformado en una notable realidad, con resultados sorprendentes para propios y extraños.
El piloto de 19 años escribe una página inédita en el motociclismo salvadoreño al participar de Liqui Moly Jr Cup de EE.UU., donde se mide con pilotos de todo el mundo, en nueve estados del país del norte.
En la categoría que está dirigida a pilotos menores de 24 años y de cilindrada baja, participan representantes de Canadá, Japón, Nueva Zelanda, México, Ecuador, Estados Unidos , Sudáfrica y se miden con marcas como Yamaha, Kawasaki y Honda.
Kevin no solo participa sino que se ha destacado en varias ocasiones: Por ejemplo, en la fecha que se realizó en Sonoma, California, obtuvo por primera vez para El Salvador y Centroamérica la pole position. Y también fue el encargado de conseguir la mejor posición de un piloto centroamericano en Motoamérica, la organización internacional de alto prestigio en el mundo del motociclismo.
El salvadoreño es parte del Altus MotoSports TEAM y ya sabe lo que es subirse al podio de la podio de la competición y acreditarse el segundo lugar en la serie general.
“Ha sido una gran experiencia en diferentes estados de Estados Unidos. Era algo que no me esperaba, es algo nuevo para los pilotos de la región, no solo para El Salvador. Creo que es la primera vez que un centroamericano llega entre los primeros tres”
Arrancó en el motociclismo a los 5 años y hoy a los 19 tiene varios campeonatos nacionales en su haber y ha traspasado fronteras. Ni siquiera la fractura que sufrió previo al campeonato, lo hizo retroceder y ya se codea con los mejores de la categoría.
Y aquí viene el plus: “En cada carrera de las que compito está la bandera salvadoreña. Siempre la llevo y es un honor para mí. Tuve lesiones en el pasado pero de todo se aprende y nunca hay que rendirse”, expresa desde Estados Unidos Kevin.
Para el resto de los pilotos, no es común competir con un salvadoreño. “Muchos me preguntaban donde estaba El Salvador, no conocían el país. Hoy ya lo conocen. Y me llaman ‘el piloto que siempre mantiene la sonrisa’”. Allí, a su modo y en su deporte, deja sentada la presencia salvadoreña en un mundo casi desconocido.
Elogios de especialistas
Según los analistas del motociclismo, las destrezas y el talento que Kevin muestra no es casualidad sino que han sido heredadas de su papá Ángel, conocido por ser uno de los mejores pilotos nacionales y con un gran palmarés en sus espaldas.
“El joven ha estado corriendo hacia el frente todo el año, pero los ajustes que hizo durante el campeonato lo han colocado en otra liga”, expresó el experimentado George Nassaney, una de las figuras del Altus Team.
Para Oswaldo Martínez, presidente de Motovelocidad El Salvador, esto es un logro histórico: “Aparte de orgulloso como salvadoreño, estamos muy contentos porque Kevin está escribiendo la nueva historia del motociclismo en el país y quizás hasta en la región. Nunca se había logrado alcanzar este tipo de logros que Kevin ha conseguido en EE.UU. Ningún piloto de la región desde Guatemala hasta Panamá, lo había logrado y estamos muy felices de que sea un salvadoreño. Esta es una nueva página gloriosa en la motovelocidad de nuestro país”.
Allí va Kevin, de San Salvador al mundo. A sus 19 años, se asoma a lo más grande del motociclismo mundial. Y con muchas chances de seguir progresando en la élite de las dos ruedas.
