“Estar al nivel de los mejores del mundo me alegra mucho. Me deja satisfacción, porque sé que me demostré a mí mismo que lo puedo lograr”. Esa frase encierra todo para Roberto Hernández. El tirador salvadoreño, de arco compuesto, incursionó en grande en su participación indoor en la II Etapa de la Copa del Mundo en Luxemburgo.
Y es que, ayer, el nacional terminó quinto, tras finalizar sus competencias mundiales. Y el ubicarse entre lo más alto de la modalidad bajo techo le dejó buenas sensaciones.
Esto, sobre todo, después de que el enfrentamiento que lo dejó afuera por dos puntos fue ante el campeón mundial, a la postre el ganador del torneo; y porque, además, impuso un nuevo récord nacional.
La historia para el campeón panamericano se escribió en grande. En primera ronda, se impuso al francés Fabien Delobelle, por 148-145; luego, en octavos de final, despachó al estadounidense Louis Prince, por 150-148, con lo que conquistó la nueva marca local; y, en cuartos, le tocó un hueso duro como el ganador: el holandés Mike Schloesser, quien lo venció 150-148.
“Muy feliz de obtener un nuevo récord nacional de 150 puntos. Tirada perfecta, para cerrar una gran participación en Europa”, publicó Hernández, en sus redes sociales.
Luego, comentó a Cancha: “Súper feliz. Creo que, cuando buscamos asistir a estos eventos, no esperábamos tanto. De verdad que tenía algo de miedo al inicio de no dar los resultados, pero ya estando acá y estar al nivel de los mejores del mundo me alegra mucho”.
Abordado sobre qué experiencia le da el hecho de incursionar en el indoor, que casi no lo hace, reaccionó: “Ha sido como un despertar para mí o reaccionar de que puedo ser bueno en esto también. Puse muchas ganas al entreno y mucho trabajo mental a la competencia, porque sabía que sería complicado”.
“Me enfermé antes de venir, no me vinieron las flechas nuevas a tiempo. Así que, incluso antes de Luxemburgo, me costó dormir por miedo a no pasar el corte para las llaves. Pero creo que me di cuenta de que puedo ser bueno acá también”, resumió el salvadoreño, contando que incluso “muchos arqueros profesionales” lo felicitaron “porque ellos también están sorprendidos”, con los resultados que obtuvo.
En cuanto a si buscará seguir yendo a las otras etapas bajo techo o si solo lo tomará como fogueo para el mundial outdoor, se sinceró: “La idea es ir a Nimes (Francia), en enero, y a Las Vegas, en febrero. Incluso, quisiera poder ir a Roma, en diciembre, para sumar puntos para la final de Copa del Mundo Indoor, pero ya veremos. Me siento con muy buen ánimo y nivel. Estoy muy alegre por los resultados”.