Así cuenta un periodista salvadoreño los festejos por el título del Real Madrid

Chomingo Chávez estuvo en la celebración del Real Madrid, que fue una auténtica fiesta, pero totalmente distinta en tiempos de Coronavirus

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Los aficionados del Real Madrid celebraron de manera muy cauta tras la consecución del título 34 del Real Madrid. Foto / EFE

Por Chomingo Chávez, Especial desde Madrid para Cancha

2020-07-16 6:34:27

Si bien la consecución de LaLiga número 34 del Real Madrid fue una gran alegría para la capital española, no se pudo festejar como de costumbre.

La Fuente de Cibeles está situada en el centro de Madrid. Cada vez que el equipo local campeona, sus aficionados la visitan con el afán de mostrar su alegría por la consecución de un nuevo título, sea este doméstico o internacional. Pero en este año atípico, el festejo también tenía que ser diferente.

Con una cerca de dos metros, la estatua de la fuente era protegida tal cual las joyas de la corona. Un cordón policial en toda la circunferencia de esta lo rodeaba para que los aficionados no entraran, y desde hace dos días, el Real Madrid había pedido que sus aficionados no recurrieran a la Plaza para celebrar. Sí, una nueva presea llega al museo del equipo merengue, pero con un sabor distinto.

Una pareja de aficionados del Real Madrid celebra desde su motocicleta cerca de la fuente de Cibeles en Madrid. Foto / EFE

Los hinchas de igual manera aparecieron, en menor cantidad, y la fiesta fue mermada. A la salida del metro había un punto policial el cuál preguntaba la razón de su visita a esa parte específica de la ciudad, y a continuación había otro punto donde no dejaban pasar a menos que fueran algún medio de comunicación. Algunas personas hicieron caso omiso e igual se acercaron, pero al momento los mandaban de regreso.

Otros aficionados se hicieron presentes temprano para poder anticiparse a todo esto, pero una vez terminó el juego se empezó a crear cúmulos de gente la cual tuvo que ser dispersada por la misma autoridad. Una celebración triste, se podría decir.

El color a esta gris historia se la puso la caravana de autos que daban vueltas en el redondel, mostrando esperanza a los que habían ido y gritando “Hala Madrid y nada más”. Fueron los más felices.

El equipo, por su parte, no hará el típico recorrido por la ciudad con el trofeo. Es más, se quedarán guardados hasta que el momento sea oportuno, pero no deja de ser una nueva alegría para el pueblo madridista.

Un aficionado del Real Madrid celebra desde su motocicleta cerca de la fuente de Cibeles en Madrid. Foto / EFE