Los destinos turísticos de El Salvador que brillaron este 2025
Entre playas de ola mundial, rutas de montaña, cascadas que parecen de postal y nuevas experiencias de aventura, El Salvador cierra este 2025 con destinos que se volvieron tendencia
Por
Leidy Puente
Publicado el 31 de diciembre de 2025
El 2025 fue un año clave para el turismo en El Salvador. El país alcanzó 4 millones de visitantes internacionales, un 7 % más que en 2024, y la meta se cumplió antes de finalizar el año. Este crecimiento se reflejó en destinos que brillaron por su diversidad: desde la aventura volcánica de Los Infiernillos en San Vicente y las cascadas Las Pilas y La Olomina en Morazán, hasta el frío de El Pital y la adrenalina del bungee en San Miguel. Playas como Oriente Salvaje y Surf City 1, junto a nuevas propuestas urbanas y rurales, consolidaron un año de viajes y descubrimientos.
El 2025 fue de esos años en los que El Salvador se sintió más viajable que nunca. Y no solo por lo que se vio en redes, sino porque el movimiento turístico también quedó reflejado en números: entre el 1 de enero y el 21 de diciembre, el país alcanzó 4 millones de visitantes internacionales, un crecimiento del 7 % respecto a 2024, cuando se reportaron 3.8 millones, de acuerdo con el Ministerio de Turismo (MITUR).
Del total, 3.3 millones fueron turistas (se quedaron más de una noche) y 700,000 excursionistas, y la meta anual se cumplió 10 días antes de terminar 2025. En ese balance, Guatemala, Estados Unidos y Honduras destacaron como los principales lugares de procedencia.
Con ese empuje, el mapa turístico terminó el año con destinos que brillaron por distintas razones: algunos por su belleza natural, otros por su carga cultural, otros por nuevas obras, y varios por la mezcla perfecta entre aventura y descanso. Este es el recuento de elsalvador.com, de los lugares que marcaron el 2025.
1. Los Infiernillos, San Vicente
Si querés un lugar que te cambie la idea de “lo típico” en El Salvador, Los Infiernillos se ganaron su puesto este año. El atractivo está en su fenómeno natural: fumarolas activas, olor a azufre, rocas teñidas por minerales y ese contraste rarísimo del agua que cambia de fría a caliente en pocos metros.
Es una experiencia de aventura pura, de caminar con precaución, escuchar el hervidero bajo tierra y sentir cómo la naturaleza está, literalmente, viva.
Nota completa: Los Infiernillos de San Vicente, aventura entre fumarolas y paisajes únicos

2. Cascadas Las Pilas y La Olomina, el “Niágara” salvadoreño en Morazán
En 2025, Morazán no se quedó solo con la fama del Río Sapo, también se consolidó con dos cascadas que impresionan por altura, fuerza y entorno.
Las Pilas y La Olomina se convirtieron en parada obligatoria para quienes aman el turismo de aventura, con senderos, pozas, bosque alrededor y esa sensación de que el viaje valió la pena desde que escuchás el agua a lo lejos. Por algo muchos visitantes las llaman el “Niágara de El Salvador”.
Nota completa: Cascadas Las Pilas y La Olomina, impresionantes destinos naturales en Morazán

3. El Pital, la cima que siempre se disfruta en Chalatenango
El Pital volvió a demostrar por qué es un clásico del turismo salvadoreño. Con su clima frío, neblina y vistas desde lo más alto del país, fue uno de los planes favoritos del año para acampar, caminar, comer algo caliente y desconectarse del calor de la ciudad.
Si este 2025 tuvo una “escapada segura” para fin de semana, El Pital estuvo en esa lista sin discutir.
Nota completa: El Pital, la cima más alta de El Salvador donde el frío y la aventura se viven al máximo

4. San Miguel, el nuevo bungee jumping desde puentes icónicos
El oriente se puso extremo. Este año, el bungee jumping en los puentes Carolina y San Antonio del Mosco se convirtió en una de las novedades más comentadas para quienes buscan adrenalina sin salir del país.
Es el tipo de plan que no necesita mucha explicación: se trata de respirar hondo, dar el paso y gritar (con gusto) mientras el paisaje se queda abajo.
Nota completa: Nuevo Bungee Jumping en San Miguel, adrenalina gratis desde dos puentes icónicos

5. Oriente Salvaje: playas con olas, calma y naturaleza rupestre
El concepto de “Oriente Salvaje” tomó fuerza este 2025 como una invitación a viajar más lento y más cerca del mar. En esa ruta, destacan playas como Las Tunas, Las Flores, La Ventana, Playitas, El Toro y Punta Mango, con un encanto que mezcla olas de calidad, naturaleza que se mantiene viva y comunidades que todavía se sienten auténticas.
Lo mejor de todo es que no tenés que ser surfista para disfrutarlo, también es para quienes van por caminar, descansar, comer algo local y desconectarse.
Nota completa: Surf City 2, el Oriente Salvaje con olas de calidad y naturaleza virgen

6. La Unión, Punta Chiquirín
Si el 2025 tuvo nuevas postales del oriente, Punta Chiquirín sonó con fuerza. El paseo costero, las vistas al Golfo de Fonseca y la vibra tranquila lo volvieron un spot ideal para caminar sin prisa, hacer fotos y ver atardeceres con el volcán de Conchagua de fondo.
En esa misma zona, el cantón Agua Escondida también se posicionó como parte de rutas que la gente está comenzando a “descubrir de verdad”.
Nota completa: Punta Chiquirín en La Unión, un paseo costero con vista al golfo

7. Surf City 1, nuevo muelle y Punta Roca en modo protagonista
Surf City 1 siguió firme como motor turístico del litoral, y este año sumó conversación con su nuevo muelle y el magnetismo constante de Punta Roca.
Es el tipo de zona donde siempre hay plan, aprender a surfear, ver el mar, comer rico y sentir que, aunque sea por un rato, el mundo se mueve al ritmo de las olas.
Nota completa: Así se disfruta Punta Roca en La Libertad: surf, picnic y entrada gratis

8. Lago de Ilopango, amanecer en kayak desde playa Apancino
En contraste con la adrenalina, también brillaron los planes de calma. El amanecer en kayak desde playa Apancino se volvió una de esas experiencias que la gente cuenta con sonrisa: remar temprano, ver el cielo cambiar de color y sentir el lago como espejo.
Un plan cercano, accesible y perfecto para cerrar el año con paz.
Nota completa: Amanecer en kayak sobre el lago de Ilopango, una experiencia que debés vivir

9. La Ruta de las Flores se renovó con spots nuevos
La Ruta de las Flores no necesita presentación, pero 2025 trajo novedades que le dieron aire fresco. En Ataco se sumaron propuestas como Monte Berat; mientras que en Ahuachapán despuntaron Restaurante Santa Mónica y Plaza El Bosque, lugares que combinan gastronomía, diseño y experiencia, y que se volvieron paradas para quienes quieren “lo nuevo” sin dejar de disfrutar el clima y el ambiente de la Ruta de la Flores.
Nota completa: Descubrí lo nuevo en Ataco, comida, vistas y descanso total

10. Chalchuapa con la peculiar Villa Bethel, el “Santorini de El Salvador”
Entre lo más comentado de fin de año estuvo Villa Bethel, en Chalchuapa, un paseo peatonal y recreativo que se volvió punto de fotos, salida familiar y plan nocturno.
Con terrazas y un estilo que muchos comparan con Santorini, el lugar se sumó como un ejemplo de cómo un espacio urbano puede transformarse para el turismo y la convivencia.
Nota completa: Conocé Villa Bethel, el "Santorini de El Salvador" en Chalchuapa

De esta manera, el 2025 cierra con destinos que brillaron y con cifras que lo respaldan. Ahora la pregunta es la que más nos gusta hacer en elsalvador.com:
¿Qué lugar nos recomendás sumar sí o sí para la ruta 2026? Contanos en los comentarios de nuestras redes sociales.
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