Los Garroberos del Sabor, más de 60 años poniendo el ritmo en el corazón de Apulo

Cuando el turismo apenas daba sus primeros pasos en El Salvador, un grupo de jóvenes músicos decidió llevar su talento a los espacios públicos. Así nacieron los hoy conocidos Garroberos del Sabor, una agrupación que ha acompañado a generaciones enteras con sus melodías y su energía en el turicentro Apulo, convirtiéndose en parte de su identidad y en uno de los atractivos culturales más queridos por quienes visitan este emblemático destino turístico.

Detrás de esa historia está Raúl Rodas, quien a sus 74 años recuerda con orgullo que ha dedicado más de 63 años de su vida a la música y a este lugar. “Cuando vine acá éramos cuatro, un cuarteto. Así empezamos, con lo poco que teníamos. Yo tenía 14 años cuando comencé, y desde entonces no he dejado de tocar”, relata con emoción.

Originario de San Miguel, Raúl creció en el campo y, sin imaginarlo, el destino lo llevó a formar parte de un grupo que con el paso del tiempo se transformaría en tradición.

“Al principio no había apoyo. A uno le decían que dejara la guitarra y se pusiera a hacer otra cosa, pero yo seguí. Me uní a otros amigos y así empezamos a trabajar en la música”, recuerda. Aquellos primeros ensayos marcaron el inicio de una carrera que hoy sigue viva y que ha acompañado el crecimiento del turismo nacional.

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De “Los Audaces” a “Los Garroberos del Sabor”

En más de seis décadas de historia, la agrupación ha tenido distintos nombres y formaciones, adaptándose a los tiempos y a sus integrantes. “Nos llamamos Los Audaces, Los Relámpagos, tuvimos como cuatro o cinco nombres diferentes. Hace unos 12 años nos consolidamos como Los Garroberos del Sabor, y así nos ha conocido la gente desde entonces”, explica Raúl.

Hoy, el grupo está conformado por cinco integrantes y se ha convertido en parte esencial del ambiente en el turicentro Apulo.

“La mayoría de clientes ya nos conocen. Muchos vienen especialmente a escucharnos. Otros nos contratan para tocar fuera, en fiestas o eventos en San Miguel y otros distritos”, comenta. La conexión con el público, el carisma y la pasión por la música los han mantenido vigentes a lo largo de los años.

El repertorio de Los Garroberos del Sabor incluye piezas populares salvadoreñas que forman parte del imaginario colectivo. Entre ellas está la icónica canción “Apulo mamá”, popularizada por Los Hermanos Flores, pero que ellos también interpretan con orgullo en cada presentación.

“Esa canción la tocamos siempre porque es parte de la historia de este lugar. Es como una publicidad para todo esto”, dice entre risas.

Una vida dedicada a la alegría de la gente

En más de seis décadas de trayectoria, Raúl ha sido testigo de cómo ha evolucionado el turismo en Apulo. Ha visto crecer el número de visitantes, transformarse el entorno y cambiar el público, pero su pasión por la música sigue intacta.

“Lo que más me inspira a seguir aquí es la alegría de la gente. Todos los días hay clientela, y ver que regresan porque les gusta cómo tocamos, eso no tiene precio”, afirma.

Durante su carrera, ha tocado diversos instrumentos: guitarra, bajo quinto, bajo eléctrico y el tradicional tololoche, conocido también como chanchona en El Salvador. “Siempre me ha gustado aprender. He tenido otros trabajos, pero este ha sido el trabajo de mi vida”, confiesa.

Aunque sus tres hijos tomaron otros caminos, él no pierde la esperanza de que alguno continúe su legado musical. “Trabajaron conmigo un tiempo, pero cada quien siguió su rumbo. Yo sigo aquí porque esto es lo mío”, asegura, convencido de que su lugar está sobre el escenario, alegrando a quienes visitan el turicentro Apulo con cada canción.

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Más que un grupo, una tradición salvadoreña

De esta manera, Los Garroberos del Sabor siguen alegrando a turistas y visitantes con sus presentaciones en el turicentro Apulo, a partir de las 11:00 de la mañana, llevando ritmo y sabor a cada rincón del lugar. “Empezamos a llegar desde temprano, aunque el grupo se reúne completo a media mañana. Y ahí estamos, hasta que se va el último visitante”, cuenta Raúl.

Además de sus presentaciones en Apulo, también están disponibles para eventos privados dentro y fuera del distrito. “Vamos a donde nos contraten, no hay problema”, asegura.

Y es que, Los Garroberos del Sabor son mucho más que un grupo musical, son un símbolo vivo de la historia del turismo y de la cultura popular salvadoreña.

Su historia demuestra que la pasión, la constancia y el amor por la música pueden convertir un pequeño cuarteto en parte esencial de la identidad de un lugar y de la memoria de quienes lo visitan.

“Aquí ha sido todo mi trabajo, toda mi vida. He visto crecer este lugar y me enorgullece saber que la música ha acompañado ese crecimiento”, concluye Raúl Rodas, con la mirada puesta en el escenario que lo ha visto tocar por más de 60 años.