Centroamérica vs Sudamérica: ¿Dónde crece más la economía en 2025?
Centroamérica avanza con estabilidad, mientras Sudamérica ofrece repuntes puntuales. Una dualidad que abre oportunidades estratégicas para inversionistas.
Por
Evelyn Alas
Publicado el 09 de septiembre de 2025
Las proyecciones económicas para 2025 muestran a Centroamérica con un crecimiento promedio del 3.8 %, superando al 2.0 % estimado para Sudamérica. Panamá lidera en el istmo con una recuperación del 4.5 %, mientras que Argentina sorprende en el sur con un 5.5 %, según el Fondo Monetario Internacional. Brasil y Colombia crecen a ritmos más bajos, y Chile muestra estabilidad. Esta diferencia regional plantea oportunidades claras para emprendedores salvadoreños e inversionistas que buscan diversificar en mercados dinámicos y estables. La cercanía, integración comercial y estabilidad macroeconómica convierten a Centroamérica en una apuesta sólida para los próximos años.
El crecimiento económico en América Latina revela dos trayectorias marcadas: Centroamérica mantiene un ritmo estable y sostenido, mientras Sudamérica presenta mayores variantes según cada país, con casos de recuperación y otros de estancamiento.
Para los emprendedores salvadoreños y los inversionistas interesados en diversificarse regionalmente, estas dinámicas representan más que números: son ventanas estratégicas.
Centroamérica: estabilidad con visión a largo plazo
Según el Fondo Monetario Internacional (FMI), la economía centroamericana crecería un 3.8% en 2025, ligeramente inferior al 3.9% registrado en 2024, pero aún por encima del promedio regional latinoamericano. Esta tendencia refleja una resiliencia estructural frente a los vaivenes globales y una mejor contención de factores internos como inflación, deuda pública y riesgos políticos.
Panamá destaca como caso ejemplar. Tras una desaceleración del 2.9% en 2024, el país del canal apunta a un crecimiento del 4.5% en 2025, gracias a la recuperación de sectores no mineros y una reactivación de la inversión extranjera. Según el propio FMI, se proyecta un crecimiento sostenido del 4% anual hacia 2030, posicionando al país como un hub de servicios logísticos y financieros con impacto regional.
En general, países como Guatemala, Honduras y El Salvador mantienen crecimientos cercanos al 3%, lo cual representa estabilidad, especialmente en el contexto de economías abiertas y dependientes del comercio y las remesas.

Sudamérica: entre repuntes puntuales y desaceleración general
El panorama sudamericano es más dispar. Brasil, la mayor economía de la región, muestra señales de enfriamiento. Luego de un 2024 con crecimiento del 3.4 %, el gobierno estima una expansión del 2.3% en 2025, mientras el Banco Central es más cauteloso y proyecta 1.9%. Factores como la alta carga tributaria y una baja inversión privada lastran sus posibilidades de recuperación más robusta.
Por su parte, Argentina sorprende con una proyección de crecimiento del 5.5 % para 2025. Esta cifra, atribuida a la expectativa de estabilidad tras reformas macroeconómicas, es aún observada con cautela por analistas debido a los históricos vaivenes económicos del país.
Chile, Perú y Colombia muestran cifras más moderadas, con proyecciones entre el 2.0% y 2.8%, sostenidas por sectores como la minería, agroexportaciones y servicios. Sin embargo, los retos fiscales y la baja productividad siguen siendo barreras comunes.
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Oportunidades para los salvadoreños que miran al sur
Para los emprendedores salvadoreños, Centroamérica continúa siendo un espacio natural de expansión, por su cercanía, afinidad cultural y menores barreras logísticas. Países como Panamá ofrecen ventajas competitivas para servicios, tecnología o productos con valor agregado.
Sin embargo, la mirada hacia Sudamérica también puede resultar estratégica. El dinamismo proyectado de Argentina representa una oportunidad para sectores como alimentos procesados, servicios digitales o bienes de consumo. Además, Brasil y Colombia, pese a sus retos, ofrecen grandes mercados internos.
Para inversionistas internacionales, la diversificación regional es clave. Invertir en economías centroamericanas puede ofrecer estabilidad y retornos predecibles, mientras que apostar por algunos mercados sudamericanos podría representar mayores márgenes, aunque con un riesgo más elevado.
Mientras Centroamérica se consolida como una región de crecimiento estable y predecible, Sudamérica ofrece casos puntuales de recuperación acelerada. Esta dualidad representa una oportunidad para pensar en estrategias mixtas, combinando seguridad con rentabilidad potencial.
El Salvador, por su ubicación estratégica, puede aprovechar ambas dinámicas. Apostar por alianzas regionales, cadenas de valor extendidas y presencia multisectorial puede marcar la diferencia en los próximos años.
Fuentes consultadas:
- Fondo Monetario Internacional (FMI), proyecciones económicas 2025.
- Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), proyecciones por subregión.
- Reuters proyecciones de Panamá 2025–2030.
- Argentina y Brasil, crecimiento económico.
- Análisis regional de América Latina 2025.
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