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El Salvador tendrá a una persona en la Presidencia perpetuada en el poder, advierten organizaciones
Ciudadanos organizados e independientes condenan las ratificaciones legislativas, de las que prevén, perpetración en el poder del oficialismo.
Entre una de las posibles consecuencias que traerán las reformas constitucionales hechas por la Asamblea Legislativa la tarde-noche de este jueves, El Salvador tendrá a una persona que ejercerá la Presidencia de la República por al menos 14 años de forma consecutiva, cuando lo máximo permitido eran cinco años, advierte Acción Ciudadana (AC).
"De nuevo, la Asamblea Legislativa aprueba una reforma constitucional de forma sorpresiva, exprés, sin ningún tipo de debate político o social, obedeciendo exclusivamente a un cálculo político", lamentó la organización ciudadana a través de un comunicado.
Menos de cuatro horas le bastó a Nuevas Ideas, PCN y PDC aprobar el acuerdo de reforma a la Constitución y una hora en ratificarlo para extender el periodo de la Presidencia a seis años, permitir la reelección presidencial indefinida, suprimir la segunda vuelta electoral y que se realicen elecciones "de medio término" para el Ejecutivo en 2027.
"Permitir la reelección presidencial indefinida, alargar el periodo de ejercicio de dicho cargo, eliminar la segunda vuelta electoral y unificar elecciones, no busca dar poder al pueblo, ni ahorrar fondos públicos, por el contrario, su objetivo real es perpetuar al presidente en el poder", advirtió AC.
Además, instruyó en que adelantar las elecciones presidenciales a 2027, unificándolas con las legislativas y municipales, busca mantener la concentración de poder y evitar cualquier pérdida de diputaciones y alcaldías.
Lo anterior, Acción Ciudadana lo califica como "algo previsible" por el creciente descontento ciudadano con la actual gestión de dichas instituciones.
"Con esta reforma, en El Salvador está prácticamente cerrada la vía electoral como mecanismo para la alternancia democrática del poder", reprochó.
Cristosal denunció que el último golpe al sistema democrático no devuelve el poder al pueblo, como afirma la narrativa oficial, sino que "se lo entrega sin limites a la familia gobernante".
"Sin contrapesos, el régimen se otorga a sí mismo el poder de perpetuidad. Tampoco puede ser entendido como una modernización del sistema político de El Salvador; sino como la repetición del modelo autócrata de otros países", señaló.
"Este es el tiro de gracia para la democracia salvadoreña. El Estado de derecho ha sido debilitado por años de concentración de poder, cooptación institucional y uso arbitrario de la ley. Ahora, esa estructura autoritaria pretende legitimarse mediante una reforma que elimina cualquier posibilidad de alternancia real", añade el comunicado.
Desesperación
"Así el miedo de los corruptos cuando se sienten desesperados, cuando saben que sin un cargo son débiles", reaccionó la abogada Ivania Cruz, de la Unidad de Defensa de los Derechos Unitarios y Comunitarios de El Salvador.
El Bloque de Rebeldía y Resistencia Popular (BRP) dijo que, como ciudadanos organizados, ya habían previsto estas acciones debido a que el tema de la democracia salvadoreña se ha venido lacerando desde que se permitió la reelección de Bukele para el periodo 2024-2029.
"Estos cambios son más bien una continuidad de toda una violación de la Constitución salvadoreña y ha habido una baja en la popularidad que han demostrado algunas encuentras", manifestó Marisela Ramírez, representante del BRP.
Según el BRP, estas medidas responden al miedo del gobierno de seguir perdiendo "hegemonía, control sobre la gente y en otro momento no poder aplicar una medida de este tipo".
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"Lo hacen en un periodo relativamente cercano (a las elecciones de 2027) para que cuando arranque el segundo periodo inconstitucional, ya tenga un lapso de tiempo mayor para seguir gobernando. Estas violaciones se toman de manera arbitraria y perpetúan una forma de dominación", añadió.
Asimismo, señaló que ya es habitual que el oficialismo tome estas medidas antes de salir de vacaciones "para que la gente se entretenga con luces, con fiesta, con playa y no se pronuncie" de lo que ocurre a nivel político en el país.
"Son modificaciones que intentan prolongar el control de facto sobre los Órganos estatales por parte de una élite empresarial y su aparato político de servicio. Este burdo intento de legalizar lo ilegítimo constituye una amenaza real contra cualquier forma de convivencia democrática sustantiva", reaccionaron los Movimientos y Colectivos en Resistencia de la Universidad de El Salvador.
El exdiputado apartidario, Leonardo Bonilla, reaccionó en redes diciendo que Nayib Bukele no saldrá del poder por la vía democrática.
El historiador Héctor Lindo, instruyendo desde las lecciones de la historia, relató que en 1938 la prensa controlada por el dictador Maximiliano Martínez comenzó a hablar abiertamente sobre su reelección. Luego, operativos políticos del partido oficial comenzaron a organizar cabildos abiertos solicitando firmas para dar la impresión de que había clamor para pedir la convocatoria de una Asamblea Constituyente y cambiara la Constitución que prohibía la reelección.
La base electoral
El experto electoral Malcolm Cartagena desmintió tres de los argumentos con los que el oficialismo justificó las reformas.
Ante el argumento frecuente que se utilizó en que era una medida basada en la popularidad, Cartagena expone en sus redes sociales (desde el exilio) que si bien el apoyo es real, este está condicionado por una narrativa dominante que asocia a Bukele con la seguridad; pero que obvia la pérdida de libertades en materia de derechos humanos y la represión a los críticos.
El otro fue con referencia a que si la oposición política o la ciudadanía no estaba de acuerdo, que lo reflejara entonces en las urnas para 2027. Para Cartagena, la idea es falsa en tanto a que el absoluto control del Estado por Nuevas Ideas "hace virtualmente imposible competir en elecciones que cumplan estándares internacionales".
Y ante el argumento de que la reelección existe "en varios países democráticos de Europa", Cartagena evidencia la falta de veracidad en ello, debido a que el sistema electoral parlamentarista de dichos países en ellos existen pesos y contrapesos que funcionan.
"Los únicos países que se asemejan a El Salvador en esto son dictaduras", apuntó.