Romance del “Perro Estrella” y Casiopea circumpolar
“Casiopea” es una de las constelaciones del catálogo estelar realizado por Ptolomeo en el siglo II. Ubicada en el cielo circumpolar señala al norte. Cuando nació Casio -la joven circense del Circo Orión- sus ojos miraron al norte de la noche estelar, poniéndole por esa razón ese nombre astral. Es decir, su amor, tragedia y destino estaban signados en las estrellas. La noche de carne-vale cuando fuera seducida por Sirius -el malabar o “Perro Estrella”- ella advirtió al seductor del riesgo mortal de su infidelidad. “¡Sal de mi habitación! -suplicó al prestidigitador. Damus ha de vengarse si llegas a amarme y lo cobrará con nuestras propias vidas!” “El lanzador duerme profundamente -respondió el seductor. Además, ha quedado encerrado en el carro de leones.” Luego entregó la llave a Casiopea. La ninfa observó temerosa entre sus manos la fría ganzúa de la seducción. Después vio apasionadamente a los ojos del malabar, suspirando exaltada antes de su primera y dulce entrega. “Escucho el palpitar de tu pecho, diosa de los dulces puñales -dijo Sirius, conmovido. Si Damus ha de matarnos cuando descubra nuestro idilio, es mejor amarnos hasta el amanecer si hemos de pagar tan alto costo. La vida es un rosal lleno de espinas. Sus rosas son el precio de herir tus manos por un eterno instante de dicha y de pasión.” La “estrella perro” y la constelación circumpolar brillaron esa noche por toda la eternidad de su entrega. (X) de: “La Máscara que Reía.” ©

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