La verdad sobre el caso de El Bosque

“En El Salvador, la justicia es como la serpiente que solo muerde al descalzo”, sabias palabras de San Romero, que hoy aplican porque un abusivo se quiere aprovechar de la pobreza, humildad y falta de educación de las familias que viven en la comunidad El Bosque.

Les voy a explicar qué fue lo que paso con las 300 familias de la Cooperativa El Bosque que han perdido sus tierras:

En 1998, la Cooperativa El Bosque adquirió un crédito para producción de café con un banco local. En ese entonces hubo una plaga, se perdió el café y la cooperativa ya no pudo pagar el crédito. Por tal razón, el banco recomendó a la cooperativa contratar a un ingeniero, para que fungiera como administrador único de la cooperativa, para que este aumentara la productividad y así generar capacidad de pago.

En el año 2004 firmaron unos contratos con la junta directiva de la empresa que legalmente representaba el ingeniero porque, supuestamente brindaría servicios de remedición y escrituración de los terrenos de los socios de la cooperativa.

En ese momento el presidente de la Cooperativa firmó dos pagarés por el monto de $130,000.00, servicios que las familias argumentan que nunca se brindaron; sin embargo, en el año 2008 el ingeniero demandó en el Juzgado de lo Laboral de Santa Tecla a la cooperativa por el monto de $850,000.00, en el cual se suman intereses convencionales, mora costos procesales. Actualmente el Juzgado de lo Laboral pidió la subasta pública de 12 terrenos de la cooperativa, para poder pagar la deuda. En estos terrenos viven más de 300 familias desde 1985. La gente que vive en la Cooperativa El Bosque son los propietarios legítimos de la tierra, ellos no están usurpando nada, han sido víctimas.

Es importante dar un dato: las 300 familias de la Cooperativa El Bosque son los legítimos dueños de las tierras desde 1985; adquirieron las propiedades producto de la Reforma Agraria. Ellos nunca le pidieron dinero prestado al ingeniero. Fue él quien a través de un contrato de prestaciones de servicios y dos pagarés sin protesto llegó al punto de exigir un incumplimiento de contrato que pasó de $130,000.00 en 2004 a $850,000.00 en 2008.

Tiene que haber claridad que las 300 familias de la Cooperativa El Bosque NO SON USURPADORES, son propietarios de las tierras en las que viven y producen a través del sistema de cooperativas.

Mi análisis es alejado de cualquier pensamiento político electoral, porque la gente tiene un problema y ver esto desde el punto de vista político es mezquino. Lo hago porque he visto en redes sociales muchísimas opiniones diciendo que está bueno que los saquen de las tierras porque no son de ellos, porque están usurpando. Ante esta narrativa mezquina solo queda explicar la verdad.

¡Ver pobres criticando y juzgando a pobres! Así de alienados nos quieren los poderes fácticos. Esto demuestra que la justicia salvadoreña se equivoca, que el sistema judicial no es perfecto.

¿Representantes de la Cooperativa El Bosque firmaron contratos por prestación de servicios y dos pagarés sin protesto por $130,000.00? ¿Cómo esta cantidad en cuatro años llegó a $850,000? Son interrogantes que no logro entender.

En la situación legal, esto ya es cosa juzgada. Desde mi experiencia profesional como abogado podría haber dos soluciones:

1. Habría que buscar un amparo ante la Sala de lo Constitucional de la Corte Suprema de Justicia y probar que se vulneraron derechos y garantías fundamentales durante el proceso y
2. II. Habría que buscar un acuerdo de pago con el Ing., negociar una salida alterna para que la gente no pierda sus propiedades.

Abogado y periodista salvadoreño.