No siempre apetece beber el agua sin más, pero hay formas de añadirle sabor sin cargarla de calorías. Las frutas, hierbas y algunos vegetales pueden darle refrescantes notas de sabor.
Los cítricos como el limón o la naranja, la bayas como las fresas o moras, el jengibre fresco, la menta, la hierbabuena y vegetales como el pepino son grandes aliados a la hora de saborizar el agua.
No hay una medida exacta de ingredientes, puedes utilizar una jarra grande y añadir un puñado de fresas o unas cuantas rodajas de pepino, por ejemplo. Lo importante es que la dejes reposar al menos unas dos horas en refrigeración para que la fruta libere su sabor.
Por supuesto, el agua adquirirá mayor sabor, pero lo perderá la fruta, que ya no estará tan apetitosa.
Si lo deseas, puedes macerar un poco la fruta para que libere más su sabor. Los ingredientes grandes como pepino o naranja puedes cortar en lascas finas, incluso puedes usarlos con la cáscara, siempre que esté bien limpia.
Los aficionados a lo dulce pueden agregar una cucharadita de miel. Otra opción es incorporar un chorrito de agua mineral, para añadir burbujas y hacer una bebida más divertida.
Si quieres adicionar hielo, hazlo al final, justo a la hora de servir.
Deliciosas combinaciones
Si bien puedes usar los ingredientes que prefieras, hay algunas combinaciones que resultan ganadoras. Aquí te tienes algunas ideas:
– Naranja, limón y menta.
– Fresas, naranja y hierbabuena.
– Manzanas, uvas y canela.
– Moras, naranja y jengibre.
– Fresa y albahaca.
– Piña y menta
– Sandía y romero
– Fresas y albahaca