¿Qué sustancias utilizan los agresores sexuales en las bebidas para sedar a sus víctimas?

Expertos en toxicología, medicina legal y de urgencias explican cuáles son las sustancias que los violadores sexuales utilizan para sedar a sus víctimas.

descripción de la imagen
elsalvador.com

Por EFE

2018-07-16 12:01:11

Los expertos distinguen, dentro de las agresiones sexuales por sumisión química: las de tipo proactivo, en las que el agresor suministra una sustancia oculta a su víctima con el objetivo de anular su capacidad de respuesta; y las oportunistas, en la que el agresor se aprovecha del consumo voluntario de alcohol por parte de la víctima.

Si bien la burundanga es la sustancia más famosa, también es de las más infrecuentes, señala la doctora María Dolores Moreno, directora del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF).

Pertenece al grupo de las denominadas “drogas de la violación” junto con la quetamina, un anestésico empleado en veterinaria que se utiliza también como droga recreativa, y el GHB, que no se sabe si se utiliza muy poco o no se detecta. “Se elimina muy rápido del organismo y hay un nivel de producción propio generado por la degradación de un neurotransmisor, por lo que es necesario encontrarlo en niveles altos”, explica esta especialista.

Te puede interesar:

Lenguaje machista en el deporte: basta ya

Hagamos lo posible por liberar a nuestra sociedad de expresiones sexistas.

Y añade que el agresor suele elegir una droga que tenga efectos de sedación y amnésicos, y a veces también se utilizan sustancias que producen desinhibición para facilitar la agresión sexual. No obstante, la directora del INTCF enfatiza que no son estas drogas a las que más debemos temer.

“Se usan sustancias de fácil administración, inodoras e insípidas y que puedan disolverse con facilidad en bebidas. Suelen ser de efecto rápido y pronta eliminación, activas a dosis bajas y fáciles de obtener”, analiza. De ahí que las más relacionadas con estos delitos sean, además del alcohol, los fármacos de uso común.

Las sustancias que se encuentran con más frecuencia, según María Dolores Moreno, son el alcohol, seguido de los psicofármacos (entre los que destacan las benzodiacepinas) y las drogas (cannabis y anfetamínicos).

Después de una agresión sexual qué debes y no debes hacer

“La amnesia, unida a la desorientación, hace que la víctima tarde en denunciar los hechos, por lo que pasan varias horas e incluso días hasta que se interpone la denuncia”, señala María Dolores Moreno.

No obstante, en un 63% de los casos en los que no se encuentran drogas, sí se demuestra la presencia de semen. “Esto indica que muchas veces que no se encuentra sustancia, probablemente la hay”, añade.

Por este motivo es fundamental que las víctimas acudan al hospital lo antes posible y sin ducharse para evitar la destrucción de pruebas, y resulta útil intentar acordarse de todas las personas con las que se estuvo antes de perder la consciencia.

Te puede interesar:

Siete de cada diez mujeres sufre violencia en El Salvador

Solo seis de cada diez mujeres denuncia que son agredidas ante las instancias correspondientes como la Policía, Fiscalía y Tribunales.

El lugar al que deben acudir las víctimas desde un primer momento es el hospital de referencia donde se realice un examen médico y se tomen las muestras oportunas.

La mayor parte de las víctimas suelen acudir solas al hospital, y en ocasiones acompañadas por algún familiar, como explica el doctor Manuel Vázquez, vicepresidente de Sociedad Española de Medicina de Urgencias (SEMES), quien pone el foco en la demora con la que se produce acudir a urgencias.

“La sensación de vergüenza y desamparo es común, ligada a cierta permisividad social –mal entendida-, que refuerza ideas como ‘si no te hubieras emborrachado…’, sobre todo en casos de sumisión oportunista”, considera.