Hasta hace un tiempo era frecuente escuchar frases en casa como “esto es lo que hay de comer y si no quieres, a la cama” o “espera, ahora estamos hablando los adultos”, cada padre encontraba el método que consideraba el mejor para criar a sus hijos, algunos con más diciplina que otros, pero siempre existían las normas y límites.
Ahora, el modelo de crianza ha cambiado mucho, con frecuencia los padres comenten el error de ser muy permisivos, al grado que son los chicos los que deciden a qué hora ir a la cama, si ordenan o no su habitación o decidir que van a comprar en el supermercado.
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La experta en educación y crianza Eva Millet, califica esta conducta como Hiperpaternidad, un modelo de crianza que nace en EE.UU., propio de las clases medias y altas, que se caracteriza por la sobreprotección de unos hijos que se han convertido en el centro de las familias del siglo XXI, explica Millet en su libro “La Hiperpaternidad. Del modelo “mueble” al modelo “altar””.
Para la escritora, la sobre protección fácilmente puede convertirse en veneración, de ahí que califica a los hiperpadres en siete tipos:
Padre helicóptero
Les resuelve la vida y está pendiente de todos sus movimientos y necesidades. El termino surge en 1969 cuando un paciente dijo a su psicólogo que no soportaba que su madre sobrevolaba sobre él como un helicóptero.
Apasionados o quitanieves
Son aquellos que en lugar de preparar a los hijos para el camino, eliminan todas las dificultades que puedan presentarse de tal manera que pasen por la vida sin traumas ni frustraciones.
Padres tigre
Son aquellas madres o padres que están muy encima del niño y estrictamente para que sea y haga lo que ellos quieren. Son exigentes y buscan la perfección.
Secretarios o agenda
Les organizan todo: la mochila, les hacen las tareas, llevan los grupos de whatapps del colegio, entre otros.
Bocadillo
Aquellos que persiguen a su niño por todo el parque con el bocadillo en la mano hasta que se lo comen, el niño le da un mordisco y sigue jugando.
Guardaespaldas
Siempre a la defensiva, son los padres superprotectores que cuidan la integridad física y emocional de los hijos al máximo, no permiten que se les toque. Se molestan si algún profesor los regaña o toman cartas en el asunto cuando un compañero los molesta.
Mayordomo
Complacientes y siempre solícitos. Siempre carga con su mochila, le lleva un vaso de agua a la cama o se levanta para satisfacer cualquier deseo y no deja que lo hagan por sí solos.
Test de hiperpaternidad de Eva Millet:
Responde a estas preguntas. Suma los puntos de acuerdo a tus respuestas y conocerás qué tipo de hiperpadre eres.
¿Tenía ya un plan trazado para las vidas de sus hijos antes de que nacieran?
¿Considera que se han convertido en el eje de su existencia?
¿Encuentra la paternidad o la maternidad más agotadora de lo que imaginaba?
¿Su agenda familiar la marcan las actividades de sus hijos?
¿Nota que en el día a día no llegan a todo, ni usted ni sus hijos?
¿Sus hijos menores de doce años tienen más de tres tardes ocupadas a la semana?
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¿Les hace fotos con frecuencia y las cuelga en las redes sociales?
¿Sus hijos necesitan que usted esté con ellos para dormirse?
¿Sufren miedos habitualmente?
¿Al recogerlos en el cole, carga automáticamente con su mochila?
¿Los ayuda con los deberes (o se los hace) por sistema?
¿Se siente culpable por no darles a sus hijos todo lo que piden?
Con frecuencia, ¿habla en plural cuando se refiere a sus hijos?
¿Ha excusado alguna vez a su hijo diciendo: «Es que tiene una baja tolerancia a la frustración»?
¿Compara lo que hacen los hijos de los otros con lo que hacen los suyos?
¿Llama a sus hijos –o le llaman ellos– varias veces al día?
¿Sus hijos tienen profesor de refuerzo, aunque no lo necesiten?
¿Los presiona para que hagan las actividades que usted quiere que hagan?
¿Discrepa a menudo con los maestros o entrenadores de sus hijos?
¿Sus hijos se aburren con frecuencia?
¿Sus hijos colaboran regularmente en las tareas del hogar?
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¿Está satisfecho con la escuela de sus hijos?
¿Sus hijos comen de todo?
Como familia, ¿tienen algunas tardes libres, sin nada planificado?
¿Acepta con deportividad que el equipo de sus hijos pierda?
¿Sus hijos son capaces de distraerse solos, sin supervisión adulta?
¿Sus hijos de más de doce años saben hacerse solos la comida?
¿Acepta que tomen una decisión por sí solos, aunque no la crea adecuada?
¿Su hijo adolescente se despierta por sí solo por las mañanas?
¿Les dice NO a sus hijos como mínimo una vez al día?
(Puntuación: del 1 al 20, por cada SI, 1 punto / del 21 al 30, por cada NO, 1 punto).
Resultado de las puntuaciones
Entre 0 y 5 puntos: usted no es ni un hiperpadre ni una hipermadre; seguro que le critican.
Entre 5 y 10 puntos: en sintonía con los tiempos, usted practica la hiperpaternidad de tanto en tanto.
Entre 11 y 20 puntos: es usted un hiperpadre o hipermadre «moderado» pero con peligro de convertirse en uno a tiempo completo (en especial, si ha contestado sí a las preguntas 1, 4, 11, 14 y 19).
Más de 20 puntos: es hora de que empiece a dejar un poco en paz a sus hijos