Semanas antes de escribir este artículo me apareció una publicidad en redes sociales en donde mostraban un trailer corto de una película salvadoreña llamada Matlatl.
El trailer no contaba mayor cosa, pero las escenas se veían emocionantes. Lo que parecía ser una película de terror nacional me cautivó.
Fue ante eso que nos reunimos con Migue Simán y Alejandra Pinto, director y productora del filme, respectivamente.
La película ha tenido poca difusión. Además de circular en redes sociales, recientemente, los dos jóvenes han hecho una pequeña visita a medios televisivos para hablar del proyecto.
Sentados los dos frente a mí, bromean, se ríen, y hablan mucho sobre cine y la importancia del mismo para la cultura de El Salvador.
Fue gracias a esta entrevista que aprendí qué era Matlatl específicamente: una película de terror que cuenta la historia de una familia que reside en la capital, que se ve obligada a mudarse a la zona rural en donde los empiezan a acechar ciertas leyendas salvadoreñas.
El concepto nació al inicio del 2016, cuando un grupo de amigos decidieron que querían hacer su primer largometraje. A continuación, crearon la compañía de producción Black Coyote, a través de la cual están lanzando la película.
Fue así que surgió la idea de Matlatl (palabra en nahuatl que significa red), escrita por Alfonso y Migue Simán. El filme inició su producción en julio de este año y fue grabada en 15 días.
Lo curioso es que estos jóvenes decidieron hacer una película de miedo. En los últimos años, se han visto pocas películas de este género en el cine nacional, que por lo general se enfoca en relatos coyunturales u otros más históricos como el conflicto armado.
Pero el país ha tenido una trayectoria de crear cine en los géneros de drama o comedia, con un par de incursiones en otros estilos.
Parte del motivo de porqué una cinta de terror, es debido a que los cineastas querían ofrecer algo alterno a la realidad salvadoreña.
“Si querés vivir la realidad salvadoreña, está bien, abrí el periódico”, asegura Migue, agregando que “queríamos solo dejarte escapar de la realidad. Asustate, pasala bien, disfrutá…”, añadió.
Cuando decidieron crear Black Coyote ya tenían la idea del filme. Esta se formó bajo la premisa de querer hacer algo salvadoreño y, como dijo Migue, no hay nada más salvadoreño que las leyendas. Ya con la idea en mano, fue que buscaron el género del terror.
Alejandra explica que la película no sólo es una alternativa de entretenimiento, sino que a través de este se exploran otras dimensiones de nuestra cultura que van más allá de los sucesos contemporáneos.
“Las leyendas salvadoreñas han marcado nuestra historia, y la manera en que la gente percibe el miedo y la forma de comportarse”, agrega la productora.
Este último punto es importante para entender el génesis del concepto atrás de Matlatl. Las leyendas están diseñadas para ofrecer una moraleja, te asusta por una razón.
Pero lo fundamental es que es una idea universalmente histórica, son narraciones que han existido por años y que hasta la fecha siguen vivas.
Por otra parte, la compañía Black Coyote está conformado por gente joven, gente en busca de crear cine. El objetivo primordial de la productora es darle vida al séptimo arte en la nación.
Esto también podría llegar a abrirle las puertas a otros cineastas que deseen hacer lo mismo. Parte de la idea, es que otros puedan poner en marcha sus proyectos por medio de Black Coyote.
“Es emocionante (hacer cine), hemos hecho varios cortos, pero es la primera vez que hacemos un largometraje”, me asegura Migue.
Para él, producir un filme es “como una montaña rusa de emociones, un día sentís que está quedando bien y el otro te dan ganas de meterle más cosas”.
Lo importante es que todos han encontrado un sentimiento de satisfacción con el proyecto, sintiéndose emocionados por el producto. “Hasta el momento sentimos que está quedando bien”, dice entre risas.
El equipo con el que trabajaron incluye a 42 personas, sumando los actores y personal de producción.
Fuera de todos estos detalles, la pregunta más importante es: ¿cuándo se estrenará la película?
Los cineastas están en estos momentos buscando una fecha para lanzarla al mercado salvadoreño. Tanto Migue como Alejandra están esperando poder estrenarla este año, “ahí por noviembre” como ellos explicaron.
Aunque existe el apoyo de los cines locales, todavía se tiene que definir una fecha. “Cuando estrenas una película, también estás compitiendo con las grandes películas que vienen”, responden.