“Veremos si los estadounidenses los salvan” es la burla de etíopes y eritreos a jóvenes de Tigray

El “paraíso” que el aspirante a Sultán pretende erigir en este suelo lo marca el albañil a quien han encargado la faena, el Fiscal de facto que ha montado tres procesos contra la abogada Berta de León, lo que una jueza ha ordenado contra Norman Quijano y las presiones sobre magistrados que fueron destituidos a dedo y en abierta violación a la Constitución

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De izquierda a derecha (sentados) Ricardo Ávila, Christina Murray, Carmen Aída Muñoz, Javier Castro, nuevo director ejecutivo de Fusades, Claudia Umaña, presidenta de Fusades, junto a nuevos miembros de la junta directiva 2021-2023. Foto EDH / Jessica Orellana

Por El Diario de Hoy

2021-05-27 10:00:35

Calificada como una “limpieza étnica” perpetrada por soldadescas etíopes y eritreas contra nacionales de Tigray, en la que han muerto cientos de miles de personas, esta matanza mantiene a África como un continente donde los conflictos entre etnias adquieren proporciones infernales, como cuando los tutsis estuvieron a punto de exterminar a los hutus en Ruanda.
Tanto etíopes como los de Eritrea se burlan de los nacionales de Tigray diciéndoles “vamos a ver si vienen los estadounidenses y les ayudan”, dando a entender que las sanciones impuestas a los gorilas al frente de Etiopía y Eritrea les tienen sin cuidado, como igualmente se burlan de los reportes de Médicos sin Fronteras, de organismos como las Naciones Unidas, de las entidades que abogan por derechos humanos y la libertad de expresión...
Las rivalidades entre grupos étnicos vienen plagando a la humanidad desde hace siglos, fuera de unos momentos en que hubo formas de entendimiento como durante el florecimiento de la civilización griega y el Imperio Romano.
Los pueblos antagónicos de los romanos fueron las tribus “salvajes” al otro lado del Rin y el Danubio, pueblos entre los cuales no podemos, en la actualidad, ver diferencias, pues difícilmente se distingue entre germanos e italianos, aunque los escandinavos “son más chelitos”.
Es una tragedia, en tal sentido, lo que está sucediendo en Birmania con la persecución montada contra los grupos musulmanes allí asentados, o en China también contra los musulmanes y los nepaleses, a quienes se someten a procesos de “reeducación”, que pueden forzar a las familias a entregar a sus hijos para “reorientarlos”, a convivir con personas designadas por el régimen, a dejar de ser lo que son y convertirse en lo que nunca llegaran a ser, procesos que también se aplican a nacionales chinos “inquietos”.
En cierta manera a los chinos convertidos al islam les aplican lo que es de rigor en países del Medio Oriente como Irán y Arabia Saudita, donde no hay una sola iglesia cristiana (católica, evangélica, ortodoxa, etc.), ni una, pese a que hay muchos, trabajadores y familias, que llegan a laborar al reino.

“Todos los infiernos sobre la Tierra son resultado de intentos por construir paraísos”

Al referirse a su propuesta de una “nueva sociedad” para El Salvador, el desgobernante describe lo usual de los dictadores, desde Lenin hasta Pol Pot y Castro: “moldear al nuevo hombre” en la misma forma como el Yahvéh del Génesis toma barro y nos hace a los humanos.
Pero la sociedad que se propone crear, la “sociedad perfecta”, puede asemejar a lo que los etíopes han hecho o impuso Stalin en Rusia y eso por una simple realidad:
No existen nuevas justicias por inventar. Como lo dijo el poeta alemán Hoelderling (1770-1843), “todos los infiernos sobre la Tierra son el resultado de intentos para construir paraísos”.
El “paraíso” que el aspirante a Sultán pretende erigir en este suelo lo marca el albañil a quien han encargado la faena, el fiscal de facto que ha montado tres procesos contra la abogada Bertha de León, lo que una jueza ha ordenado contra Norman Quijano y las presiones sobre magistrados que fueron destituidos a dedo, en abierta violación a claros preceptos constitucionales.
A todo esto se agrega la aprobación de más y más y más y más prestamos, dineros que se los “traga la tierra”, que en nada benefician a la gente y que nuestros hijos, los hijos de nuestros hijos tendrán que pagar, jóvenes y niños por venir a quienes se roba su alegría y su futuro...