Lo más grave de esta pandemia es que las decisiones las toman políticos ignorantes cuyas metidas de pata están poniendo en riesgo a la población, al negarse a escuchar la opinión de los médicos sobre cómo se debe manejar la crisis sanitaria. No se consultó al gremio médico sobre la construcción del supuesto hospital, de acuerdo con las necesidades de nuestro precario sistema de salud, y de cómo enfrentar la pandemia.
Prestigiosos médicos infectólogos han recomendado medidas que, en su opinión, eran prioritarias para luchar contra el virus, que no fueron escuchadas. Cuando se solicitó que los laboratorios privados pudieran realizar los exámenes del COVID-19, el ministro Alabí declaró que se necesitaba tiempo para que el Ministerio verificara si los privados tienen condiciones. Y posteriormente aseguró “no haber encontrados en los laboratorios privados los termocicladores que puedan realizar el proceso de extracción y amplificación de muestras para realizar PCR”. De inmediato, el Dr. Solano Leiva puso en evidencia la ignorancia del Ministro: “Es cierto que el equipo al que se refirió NO existe en los laboratorios privados, porque estos tienen un equipo más moderno que el del laboratorio nacional”. Rechaza también que el MINSAL haya investigado los laboratorios privados, ya que ningún hospital ha recibido ni lineamientos ni inspecciones del gobierno.
Cuesta creer la excusa presidencial de que “hay una imprecisión, probablemente al decirlo en la TV, se me fue. A veces uno lee los ceros, y se le va. No fueron $575 millones, sino que $575 mil”. Y aunque no extraña que le fallen las matemáticas, es curioso que días antes, cuando la comisionada Recinos y el ministro Alabí anunciaron con bombo y platillo la compra de $575 millones, nadie los desmintió, ni ellos aceptaron que se les dispararon los ceros. El presidente lo dijo cuando la OMS advirtió del riesgo del uso del medicamento. ¿Por qué no consultaron a los médicos especialistas? ¿Qué entienden la Comisionada y el Presidente de medicina?
El presidente del Colegio Médico. Dr. Milton Brizuela, criticó que hasta el momento no se les ha permitido conocer de qué manera el gobierno dice haber equipado o remodelado los centros de salud y hospitales. Tampoco han considerado el estudio de la UES que recomienda que los pacientes asintomáticos guarden cuarentena en sus casas, para desahogar el sistema hospitalario del país. Es un hecho que el único plan del gobierno es mantenernos encerrados, mediante el miedo, para poder seguir gastando los fondos públicos sin tener que dar cuenta del uso de los mismos. Y con tanta mentira, todavía tiene valor Conan Castro de pedir confianza a la población, mientras el otro Castro insulta y vocifera en la Asamblea, culpando a los diputados de todos los males que Bukele y sus seguidores están causando al país.
P. S. Twit de Bukele: “Todos los presidentes dan un discurso el 1 de junio, aniversario de la Toma de Posesión. Pero nuestro país no está para actos, sino para que trabajemos 24/7 para detener la pandemia. Por lo que envié una nota al Presidente de la AL para posponer este evento”.
Señor presidente, no es un discurso lo que debe pronunciar ante la Asamblea Legislativa, sino una rendición de cuentas de cómo ha cumplido los deberes que como mandatario le exige la Constitución que usted juró cumplir.
La Asamblea se lo pide, porque ante la falta de transparencia, el pueblo tiene derecho a saber la verdad de su manejo de la cosa pública, y no las mentiras que acostumbra decir en sus interminables y ofensivas arengas. La cita es mañana, no hay excusa para evadirla.
Maestra.