“Moneda al aire”

Siendo la inseguridad física un problema de todos, no sería mala idea integrar a las fuerzas vivas de la Nación para lograr una política de Estado en este tema

descripción de la imagen
La menor de las Kardashian dejó boquiabiertos a sus seguidores. Foto EDH / Instagram

Por Eduardo Torres

2019-07-16 6:04:13

Un politólogo ecuatoriano me preguntó durante el fin de semana sobre nuestro nuevo presidente, ante lo cual señalé lo que para mí son las oportunidades y riesgos con que inicia el quinquenio. “Moneda al aire”, me respondió, al comentarme que en esa forma solía responder él cuando —fuera de su país— le preguntaban por Rafael Correa cuando iniciaba éste su gestión presidencial. Cuando tiras una moneda, continuó, o te cae cruz o te cae corona. Correa, agregó ya de forma anecdótica, cayó en el lado equivocado de la moneda.

En este mes y medio transcurrido desde la toma de posesión en nuestro país, lo mejor que para quien escribe ha hecho el gobierno ha sido retomar como referente a Washington D.C. en lugar de Caracas (y La Habana), habiendo concretado el giro de 180 grados en el reciente foro de la OEA en Bogotá, al cruzar el puente —sin retorno— en relación con Venezuela y Nicaragua. Si bien por simple realismo político era esto lo mínimo por hacer con posterioridad al FMLN, tiene mérito que se haya hecho durante el primer mes de gestión. “Cosa más grande en la vida, chico”, veremos cómo se desarrolla ahora la relación con la Isla.

La rigidez ideológica del anterior proyecto político en el gobierno les llevó por décadas a inculcar el concepto de la lucha de clases, por lo que nunca se sintieron cómodos con los generadores de riqueza: el sector privado. Un par de puntos de crecimiento del PIB, suele decir un apreciado amigo, a todos nos harían sentir mejor. Si el gobierno logra generar la confianza requerida mejorará la economía y en esto parecen estar más claros los actuales que sus antecesores, ya que evidentemente Bukele no tiene las amarras ideológicas de aquéllos. Le bastará crear un entorno más propicio para que el empresariado sienta que su inversión está asegurada.

Pero también hay peros. El “están conmigo o están contra mi” en tiempos de debacle de la clase política tradicional muestra rasgos autoritarios a los que, con el auge del populismo global, hay que ponerles especial atención. No es válido, por ejemplo, lo que se le ha hecho a la periodista Mariana Belloso y a otros con espíritu crítico. Atenta contra la libertad de expresión, y, en el caso de ella, contra su condición de mujer y de profesional. Vale recordar que la libertad de expresión (y de información) es la piedra angular que sustenta el Estado democrático.

Pero por paradójico que resulte, donde más se ha visto el “están conmigo o están contra mí” ha sido en el tema seguridad. El tema de la inseguridad es el principal problema de los salvadoreños. Pocos estarán en desacuerdo con que se requiere una nueva aproximación en esta área —léase la necesidad de un plan integral—. Siempre habrá detractores, aunque lo más probable es que se gane más adeptos que críticos —depende del plan— al darse a conocer, porque a pura opinión pública como venimos difícilmente se logrará dar sostenibilidad de ejecución a un plan.

En este mes y medio de gestión se ha logrado desarticular los puestos de mando de las pandillas con duras medidas en los penales y manteniendo presencia en el territorio, haciendo que los pandilleros salgan de su hábitat natural. No se sabe si se quedarán así; ojalá así fuera, pero la mejora a los servicios básicos en las comunidades no habrá de lograrse de la noche a la mañana. Siendo la inseguridad física un problema de todos, no sería mala idea integrar a las fuerzas vivas de la Nación para lograr una política de Estado en este tema. Podría quizá ayudar a dar un mayor grado de certeza de que acá la “moneda al aire” caerá en el lado correcto.

Abogado y periodista.