Hitos para esta Navidad

Esto es solo el inicio de lo que nos conducirá hacia tiempos más adversos que ahora. Y frente a lo que nos depara el futuro, sólo tenemos un camino, el de la RESISTENCIA.

descripción de la imagen
Kevin Santamaría, durante un entreno con la Selecta. Foto / Cortesía Fesfut.

Por Andy Failer

2021-12-22 6:16:55

Estimados lectores, como ya saben, este año ha sido crítico para la historia de nuestro país. No solo continuamos enfrentando la pandemia sino que también este 2021 se produjo un fuerte golpe democrático que amenaza el futuro y la estabilidad de El Salvador. Esta columna es la #36 que escribo en lo que va del año y, al menos el 90 % de mis escritos han estado relacionados a los sucesos que han cambiado, para mal, el trayecto de la nación. Criticar y hacer reflexión colectiva sobre todo lo que ha acontecido este año, ha sido una experiencia que siempre deja mal sabor de boca, pero ha sido más que necesaria. Esta columna navideña contiene valoraciones importantes sobre tres hitos que definieron el panorama político y social de este año y de los que están por venir, hitos que no podemos olvidar.

1M: Golpe a la República
La destitución de los magistrados y el Fiscal General es un mancillamiento hacia nuestras instituciones y representa la gestación del secuestro de la República. No debemos olvidar que quienes somos parte de la generación posguerra, somos hijos de un esfuerzo colectivo para tener un país más democrático. Nos corresponde voltear a ver el pasado con respeto; no todo se logró y quedaron compromisos pendientes, pero debemos apreciar la obligación de entender que no tenemos derecho a manosear una historia de reconciliación, no tenemos derecho a nublar un recuerdo de paz que asombró al mundo, no tenemos derecho a desgarrar las cicatrices de nuestra memoria fértil y retroceder en el tiempo. Esta Patria no merece más sufrimiento.

8J: Ley Bitcoin
Lo que sucedió ese 8J fue la aprobación exprés de una política monetaria que se dio a conocer en Twitter, como es de costumbre para Bukele. Sí, al ritmo de un tuit fue como nos enteramos que El Salvador sería el primer país del mundo en aceptar el Bitcoin como moneda de curso legal; surreal, como que fuese poca cosa, ignorando que su impacto económico va a trascender por generaciones. Fuimos testigos de más marketing pero no de ninguna decisión monetaria que denote el mínimo de seriedad.
La Comisión Financiera de la Asamblea Legislativa, encargada de estudiar el proyecto de la Ley Bitcoin, sesionó apenas durante 45 minutos el mismo día que se aprobó la Ley. Nada distinto a cómo dolarizaron el país hace 2 décadas.

15S: Primer gran marcha
El 15S no solo pasará a ser recordado como una explosión de protesta masiva de ciudadanos indignados frente a la tiranía del clan Bukele. Ese 15 de septiembre hace honor a memorias colectivas, porque la indignación no olvida; no olvida a los miles de desaparecidos que ya superan las cifras de los tiempos oscuros de este país; no olvida los feminicidios; no olvida el rotundo fracaso del Bitcoin; no olvida la persecución política; no olvida la corrupción y la impunidad de quienes se aprovecharon de la pandemia; no olvida el golpe del 1M ni el atentado a los jueces de nuestro sistema judicial; no olvida el pacto con las pandillas; no olvida la militarización del Estado; no olvida el endeudamiento desmedido; no olvida las jugadas turbias que conducen a la reelección presidencial y tampoco olvida el paquetazo de reformas constitucionales. Me es imposible no traer a este texto una frase de uno de los más emblemáticos discursos de Salvador Allende, la cual es muy oportuna frente a todo lo que está implosionando en El Salvador: “La historia es nuestra y la hacen los pueblos”.

***

Estos hitos definieron este año y desencadenaron una serie de sucesos que nos tienen en donde estamos parados hoy en día. Esto es solo el inicio de lo que nos conducirá hacia tiempos más adversos que ahora. Y frente a lo que nos depara el futuro, sólo tenemos un camino, el de la RESISTENCIA. Cierro este texto planteando una pregunta que ya no necesita respuesta, es más bien un recordatorio navideño: ¿Cuál es la ruta?

Comunicólogo y político