Huellas y cicatrices en el libro de la vida

La vida es el único libro cuyas páginas ya escritas no se pueden borrar. Procura escribir en ellas lo dulce del amor para después mañana en vez de llorar por lo inscrito, puedas sonreír por haberlo vivido. El texto de nuestra biografía está marcado con cicatrices y arrugas, como viejas heridas y caminos recorridos. La cirugía cosmética quita imperfecciones del rostro de una hermosa mujer que -como flor de un día- empieza a perder la lozanía del cutis. Pero la belleza interior no tiene daños ni cicatrices para quien puede verla y admirar. La hermosura del espíritu no siempre es vista dentro de un mundo superfluo y banal. La actriz mejicana Laura Flores recibió duras críticas por su abdomen marcado, que su vestuario escénico dejaba al descubierto. Sus tatuajes molestaron a sus “fans”. Pero el arte del “tatoo” de la existencia se encarga de tatuar nuestra piel y nuestra historia. Dichosos aquellos en quienes grabó un corazón, un ave en vuelo o una estrella. ¡Huellas y cicatrices en el libro de los años! Aquellas que no pueden borrar ni la cosmética ni el glamour. Biografía en la piel del actor en escena que somos en el teatro del mundo. <“La Esfinge Desnuda” C. Balaguer-Amazon>