La tragedia de la niñez salvadoreña

Si un especialista en mercadeo o en el control de las masas pudiera brindar su opinión sobre esta nueva obra de teatro, creo que su punto de vista es que todo marcha sobre ruedas pues se pierde la atención a lo que realmente importa para verter odio contra "el malo" (malo es aquel que no piense como yo)

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Así se ve el río Yamuna con la espuma tóxica. Foto EDH/ AFP

Por Ricardo Lara

2019-11-13 6:52:37

Nuevamente en El Salvador se encienden las alarmas que indican peligro a la niñez. Nada está oculto, el ataque voraz contra la niñez es más común de lo que nos imaginamos. Tristemente hay muchas formas de violencia contra la niñez, entre ellas está el abuso sexual, el abuso psicológico, el trabajo forzado, el maltrato físico, abandono, bullying, maltrato verbal, maltrato económico y el maltrato institucional.
Para la sociedad salvadoreña, tan acostumbrada al abuso de la niñez, nada debería extrañar. Basta hacer un recorrido por las últimas décadas. Durante el conflicto armado se escribió una de las páginas más oscuras de abuso infantil llevadas a cabo por un grupo alzado en armas; luego tenemos el movimiento pandilleril donde un niño imita y desea ser como el adulto; lo anteriormente mencionado lo sabemos todos y nadie hace nada.
Quizá será el maltrato institucional el más perverso pues son los garantes de brindar cuidos y protección a la niñez pero ¡Qué importa la vida y el honor de una niña! Tristemente el acontecimiento que ha desatado indignación más parece un circo romano donde lo único que se busca es llevar agua a su molino.
Instituciones responsables como el CONNA aparecen con comunicados temerosos sin sustancia; pero llama mi atención la actitud pasiva de la extinta oposición legislativa, ante el pésimo desempeño realizado. ¿Cómo es que la nacionalización de un futbolista extranjero sea tema de agenda nacional y no el fervoroso deseo por elaborar leyes que de verdad apoyen a nuestra niñez y una falta se convierta en delito?
El abuso infantil se manifiesta no solo en el tocamiento de los genitales de una niña. ¿Qué decir de la niña que debe llevar un cántaro mientras viva para apenas paliar la escasez de agua? ¿Y quién es el abusador? Será ANDA. Ese es otro tipo de abuso infantil, el perverso trabajo infantil. ¿Quién hace algo por aquellas niñas que esperan que el semáforo se ponga en rojo para pedir unos centavos? Nadie, todos callamos y como vivimos tan acostumbrados a la perversión nada parece extraño al ojo, el abuso sexual no es exclusivo de un determinado sector pues recientemente un sacerdote fue separado de sus funciones clericales mientras se le investiga.
¡Qué podemos esperar! Así de mal pintan las cosas y llama profundamente la atención ver lo dividida que esta nuestra sociedad: los buenos contra los malos, donde se juzga a una persona que civilmente fue condenado a muerte aunque legalmente sea un hombre libre y aquí nadie está exento de tal aberración grupal. ¿Qué hace la Fiscalía General de la República? Esto sí es preocupante pues la institución responsable de velar por el Estado de Derecho parece más un avestruz que esconde la cabeza ante tantísimos casos de abuso infantil. ¿Cuál es la posición del Procurador de los Derechos Humanos?
Si un especialista en mercadeo o en el control de las masas pudiera brindar su opinión sobre esta nueva obra de teatro, creo que su punto de vista es que todo marcha sobre ruedas pues se pierde la atención a lo que realmente importa para verter odio contra “el malo” (malo es aquel que no piense como yo); temas de interés nacional como es el de las pensiones quedan relegados al olvido para dar cabida a camisetas con mensajes de apoyo a lo invisible.
Ex fracciones legislativas prefieren retarse a duelo en vez de revisar y cambiar leyes que vayan en beneficio de lo más importante que una sociedad pueda tener como es su niñez. No hay excusas para no abordar el tema del abuso infantil y este caso será el que de pauta a la agenda de oferta legislativa del 2021. Ya veo algunas diputadas con sus hijos en brazos en la menor oportunidad en su papel de madres anegadas queriendo mostrar su apoyo a la niñez y ocupado a sus críos como parte de la propaganda política, para bien del país muchos de los actuales diputados en el 2021 será un ¡Nunca más! Ya que durante su triste gestión poco o nada hicieron para proteger a la niñez salvadoreña.

Médico.