"El derecho de autodeterminación permite a los pueblos decidir su forma de gobierno y organizarse libremente, sin injerencia de países foráneos, en pos de obtener un mayor desarrollo social, cultural y económico”.
La creación de la Organización de las Naciones Unidas, en 1945, fue importante en el desarrollo del “derecho de autodeterminación”. Con su amparo, la Carta de las Naciones Unidas reconoce “la autodeterminación” un eje fundamental del nuevo orden internacional.
Hasta aquí las cosas suenan muy bien. El problema aparece cuando un gobierno elegido democráticamente, como el caso de El Salvador, inicia acciones ANTIDEMOCRÁTICAS e INCONSTITUCIONALES, “en nombre del pueblo”, acciones que no fueron anunciadas, detalladas, ni explicadas en propuestas de campaña (no hubo propuestas), estas acciones son violatorias de las Leyes de la República, según Art. 86 Cn.: “Los funcionarios de Gobierno son delegados del pueblo y NO TIENEN MÁS FACULTADES QUE LAS QUE EXPRESAMENTE LES DA LA LEY”.
Destituir, nombrar Magistrados y Fiscal General (por muy mal que le caigan “al Pueblo” o al presidente), sin cumplir el proceso de Ley, rompe los Principios Democráticos de nuestra forma de Gobierno. Art. 85 Cn. “El Gobierno es Republicano, Democrático y Representativo”.
Se escucha que “el Pueblo está feliz” con las acciones antidemocráticas tomadas, pero lo que ocurre es que no está consciente de las graves consecuencias que dichas acciones implican, o si lo está, no parece dispuestos a admitir su grave error de otorgar excesivo poder al presidente, quien desmanteló, en un solo día, nuestra REPÚBLICA de 200 años.
“La oposición, como parte del pueblo”, apremia la ayuda de la Comunidad y Organizaciones Internacionales como la OEA y ONU. ¿por qué?, porque internamente no existe más, institución alguna que defienda sus derechos incluyendo los de nuestro sabio pueblo.
¿Cómo podría ayudar la OEA?, Parafrasearé LA CARTA DEMOCRÁTICA INTERAMERICANA, Artículo 20: “En caso que un Estado Miembro ALTERE EL ORDEN CONSTITUCIONAL y afecte gravemente su orden democrático, cualquier Estado Miembro o el Secretario General podrá convocar de inmediato al CONSEJO PERMANENTE para evaluar la situación”.
“El Consejo Permanente realizará gestiones diplomáticas, para PROMOVER LA NORMALIZACIÓN DE LA INSTITUCIONALIDAD DEMOCRÁTICA. Si las gestiones resultaren infructuosas o si la urgencia del caso lo amerite, convocarán de inmediato a la ASAMBLEA GENERAL y continuar la gestión diplomática para normalizar la institucionalidad democrática”.
Artículo: 21 “Cuando la Asamblea General constate que hay ruptura del orden democrático en un Estado Miembro y las gestiones han sido infructuosas, podrá decidir suspender de inmediato a dicho Estado de su derecho de participación en la OEA, con el voto de dos tercios de sus Miembros. El Estado Miembro suspendido deberá continuará cumpliendo sus obligaciones como miembro de la OEA, en particular en materia de Derechos Humanos.
En conclusión, la OEA puede suspender (expulsar) a un País miembro, conllevando posiblemente a un aislamiento diplomático, económico, comercial, migratorio y político, en un ámbito de vital importancia para El Salvador, ya que carecemos de riqueza natural y dependemos en por mucho del apoyo financiero internacional. Valoren ustedes, hermanos salvadoreños...
Economista.