El pueblo salvadoreño y especialmente el gremio de abogados estamos de luto por la inesperada partida de nuestro querido amigo, Doctor René Fortín Magaña, hacia la inmortalidad.
Referirnos a las muchas cualidades que tenía el Doctor René Fortín Magaña como figura intachable, brillante abogado, poeta, escritor y hombre público, llenaríamos muchas páginas plagadas de sus múltiples atribuciones que lo convirtieron en un ciudadano integral, ya que su hoja de vida está plagada de actos positivos que hicieron de él un personaje fuera de serie.
El Doctor René Fortín Magaña fiel a sus principios fue un incansable enemigo de las dictaduras de cualquier signo que fueren y luchó toda su vida por el sistema democrático, abogó fervientemente por el absoluto respeto a la Constitución de la República y por ende del Estado de Derecho.
Fuimos testigos del espíritu cívico e indomable que lo caracterizó, habiendo formado parte de un grupo de estudios político constitucionales que estuvo originalmente integrado por los doctores Alfredo Martínez Moreno, Enrique Borgo Bustamante, Ángel Góchez Marín, Abraham Rodríguez, René Fortín Magaña, José Domingo Méndez y René Hernández Valiente, el cual con la partida del Doctor Fortín Magaña, hemos quedado reducidos al Doctor Alfredo Martínez Moreno, Enrique Borgo Bustamante, José Domingo Méndez y René Hernández Valiente.
El Doctor Fortín Magaña incursionó en la vida pública como miembro del Consejo de Gobierno Revolucionario que derrocó al Presidente José María Lemus; como Magistrado de la Corte Suprema de Justicia, Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de El Salvador, fundador del Instituto Iberoamericano de Derecho Constitucional y en sus tiempos de estudiante fue Presidente de la Asociación General de Estudiantes de la Universidad de El Salvador (AGEUS), instituciones en donde hizo gala de su valentía y clara inteligencia, además de su acrisolada honradez. Por enarbolar la bandera de la Justicia y el Derecho sufrió persecuciones, vejámenes y el exilio. Intentó formar un partido político que de veras contenía BUENAS IDEAS para convertir nuestro país en un lugar en donde se pudiera vivir en libertad, paz y democracia.
Últimamente mostró una profunda preocupación por el rumbo que lleva el país, donde se viola constante y flagrantemente la Constitución de la República, irrespetando el sagrado y democrático principio de la división de los poderes.
Lamentablemente el Doctor René Fortín Magaña se nos adelantó en el camino, dejando un enorme vacío muy difícil de llenar dada las impecables cualidades cívicas, intelectuales y patrióticas que siempre lo distinguieron.
Este legado que deja el Doctor René Fortín Magaña para los hombres libres de este país debemos asumirlo con mucho orgullo, ya que proviene de un ciudadano ejemplar, por lo que los jóvenes y otros ciudadanos no tan jóvenes debemos comprometernos en lo poco que nos resta de vida a seguir en la senda de patriotismo y decencia en todo los órdenes que fue trazada por el Doctor René Fortín Magaña.
Finalmente, quiero expresar el impacto que ha producido en los miembros de Concertación Democrática Nacional (C.D.N), organización cívica que presido, por el sensible deceso de nuestro querido amigo y su querida esposa.
Que descansen en paz…
Ex Presidente de la Corte Suprema de Justicia y Presidente de Concertación Democrática Nacional.