La segunda fase de la reapertura económica programada para el próximo 7 de julio se mantiene en vilo, luego que el ministro de Salud, Francisco Alabí, asegurara ayer que no existen las condiciones para pasar a la siguiente etapa, tras un aumento de casos de contagio esta semana.
“No tenemos los indicadores de salud para avanzar a una fase dos”, expresó el funcionario.
En la entrevista televisiva de Frente a Frente, el funcionario expuso que “durante la cuarentena hubo estabilidad de los casos. “Eso es congruente con la fase en que estábamos en cuarentena (…) se empieza a elevar rápido en la fase uno porque previo a que iniciara hubo una incertidumbre jurídica y política y fue en el momento que escuchábamos los pitos y las cacerolas”, añadió.
El ministro de Salud achacó a la situación política y jurídica como los factores que llevaron a ese incremento, así como la protesta desde la ciudadanía; sin embargo dejó fuera del análisis la situación que enfrentó la población por la Tormenta Tropical Amanda, en donde la emergencia por las lluvias y la tragedia obligó a salir a la población y las aglomeraciones para recibir el bono de $300 que entregó el gobierno.
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Hace diez días, médicos especialistas advirtieron que el COVID-19 podría haber entrado en la fase 4, es decir, hospitales saturados que ya no dan abasto para la atención de más pacientes, así como un gran número de personal sanitario infectado por el virus.
“Estamos en un proceso acelerado de progresión, llegando a la cuarta fase (de la pandemia) en donde los hospitales ya no van a dar cabida a las personas. Esto es en parte porque la población no ha guardado bien la cuarentena, la gente no entiende. Cuando se dijo que no habrían medidas restrictivas, la gente salió a la calle” sin tomar las medidas sanitarias establecidas, aseguró el presidente de la Asociación Salvadoreña de Infectología, Mario Gamero.
El ministro de Salud dijo ayer, que es necesario “limitar el ascenso brusco de los casos confirmados y después de manera estratégica ir haciendo las actividades”.
El funcionario descartó la opción de una cuarentena focalizada, tal como lo propone la Asamblea Legislativa.
“Las acciones compartimentalizadas, que se van a tomar ciertos sitios ya han sido implementadas en el momento que tenían que ser; y hoy por hoy hablar de localizaciones para restricciones, de alguna manera, sin impedir la circulación es complejo”.
El 17 de abril, la presidencia ordenó que ese día a partir de las 7:00 de la noche y durante 48 horas se ejecutará un cerco sanitario en el Puerto de La Libertad. De esa medida se conoció más la restricción de movilización, pero no hubo informe de medidas sanitarias que caracterizan los cercos sanitarios como la búsqueda de casos sospechosos de la enfermedad. Medida similar fue tomada, también, en el centro de la capital y en otros municipios; ordenados por las alcaldías.
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Empresarios, expectantes
Mientras tanto, los principales dirigentes empresariales se mantenían expectantes hasta ayer por la noche, a la espera de un anuncio oficial por parte de las autoridades.
“Estamos esperando la confirmación”, señaló Jorge Arriaza, director ejecutivo de la Asociación Salvadoreña de Industriales (ASI), quien prefirió no opinar sobre la medida antes de que esta confirmado por las autoridades.
Sin embargo José Velásquez, director ejecutivo de la Cámara Salvadoreña de la Construcción (Casalco) dijo hace unos días que la ministra de Economía y el secretario de inversión les aseguraron esta semana que la Fase 2 se mantenía, pero pedían a los empresarios que siguieran dándole el transporte a sus empleados pues solo estaba en debate la reactivación del transporte público.