El 98 % de las remesas se envía a través de canales tradicionales

Los salvadoreños en el exterior siguen optando por los bancos y las empresas remesadoras para enviar dinero a sus familiares. Al recibirlo, los ciudadanos retiran inmediatamente el dinero efectivo en ventanilla.

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Según los datos del Banco Central de Reserva, el 68.2 % de las remesas enviadas a El Salvador se retiran en ventanilla y solo el 29.8 % se depositan en una cuenta bancaria. Foto EDH / archivo

Por Magdalena Reyes

2021-06-23 8:00:27

Los salvadoreños en el exterior prefieren los canales tradicionales para enviar remesas a sus familiares.

Según datos del Banco Central de Reserva (BCR), en lo que va del año, de los $3,035.3 millones enviados bajo este concepto, el 98 % se han cobrado a través de transferencias a agentes bancarios e instituciones remesadoras y sólo un mínimo de 0.3 % se ha enviado a través de recargas móviles. Otro 1.7 % ha sido en efectivo.

Las remesas familiares cobradas a través de instituciones bancarias representaron el 35.2% del total, equivalentes a $1,068.5 millones, mientras que otro tipo de instituciones dedicadas al pago de remesas familiares representó el 62.8% del total, que equivale a $1,906.6 millones.

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Y a la hora de recibir el dinero, la mayoría prefiere tener los dólares en mano pues las remesas familiares cobradas en ventanilla en el período de enero a mayo sumaron $2,070.2 millones. Esto equivale al 68.2 % del total de remesas cobradas. Mientras que las remesas depositadas en una cuenta bancaria totalizaron $904.9 millones equivalentes a 29.8% del monto global y con un crecimiento de 67.6% respecto al año pasado.

Los envíos de remesas a través de recargas incluso bajaron de porcentaje pues hace un año representaban el 0.5% del total de envíos y en 2021 solo ha significado un 0.3 % del total.

Según el BCR, hasta mayo de 2021 se registraron 9.6 millones de envíos de remesas, con un crecimiento anual de 23.9%, y el monto promedio por operación se elevó a $311 dólares, 21% más que al mismo mes del año pasado ($54 adicionales).

Según el economista Rafael Lemus, estos canales de remisión de remesas son elegidos por los connacionales pues representan entidades formales, privadas y con un bajo riesgo.

“Lo importante es que eso es un mecanismo privado, eficiente y seguro que no ha presentado mayor riesgo y en algunos casos el costo de transacción es incluso menor que el 1 % del monto que se envía, sobretodo cuando se opera a través de bancos”, destacó.

Según el Banco Mundial, la tarifa promedio para el envío de remesas, dependiendo de la firma y el tipo de transacción, es de 2.85%.

Escépticos al Bitcoin

El 9 de junio la Asamblea Legislativa aprobó la Ley del Bitcoin, una medida que el presidente Nayib Bukele asegura que facilitará el envío de remesas sin ningún tipo de comisión. Sin embargo, los salvadoreños radicados en el extranjero así como los receptores de remesas en el país se muestran escépticos a aceptar esta moneda como forma de envío de su dinero.

Ana Reyes, quien vive en Virginia, Estados Unidos, afirma que paga entre $8 y $10 por enviar remesas a sus familiares a través de dos principales empresas remesadoras de su ciudad.

“Por ese mismo monto se pueden enviar hasta $2,000 y la persona a la que se lo envío puede cobrarlo incluso en un permercados”, afirmó.

Darío Guzmán, quien vive en Canadá también asegura que paga un promedio de $8 para hacer sus envíos de dinero hacia El Salvador pues prefiere hacerlos a través de empresas remesadoras.

Y quienes las reciben en El Salvador las reclaman en efectivo. Dalila Campos de Ortega, residente en Sonsonate y quien habitualmente recibe remesas, afirma que seguirá cobrándolas en dólares, porque las criptomonedas, “no son dinero ni en papel, ni en metal, porque es todo digital”.

“Esa moneda no tiene ningún respaldo y se pueden dar estafas, no genera confianza”, agregó.

En la misma línea se expresó Ulises Barahona, habitante en Mejicanos, quien habitualmente recibe remesas y las prefiere en dólares.

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La extrema volatilidad en el precio del Bitcoin, que puede hacer variar el valor de una remesa entre su punto de salida y la de llegada, es uno de los problemas asociados a este mecanismo y lo que más cuestionan los expertos.

“Para que una moneda cumpla con la función de reserva de valor (...) no debe ser tan volátil”, resumió el expresidente del estatal Banco Central de Reserva (BCR), Óscar Cabrera, a la agencia internacional de noticias AFP.

Además, no hay garantía del beneficio que represente enviar las remesas convertidas en criptomonedas.

Manuel Orozco, director del Centro para la Migración y la Estabilización Económica en Washington, explicó a la agencia AFP que “el éxito” de los envíos en Bitcoin “está apoyado en dos supuestos” que son el funcionamiento de “la ley que exige aceptar la criptomoneda, (y) que el migrante enviará remesas en criptomoneda”.

“Hasta ahora, la industria de remesas ha sido muy reacia a meterse a ese mercado. Una de las razones es que su valor de uso (de la criptomoneda) es limitado. Otra, que la moneda como parte de un ecosistema financiero virtual carece de fuertes controles de seguridad”, sostuvo.

Por otra parte, “es totalmente incorrecto asumir que no habrá costo de transacción” en el envío de remesas en Bitcoin, “ya que el procesamiento mismo y el sigilo regulador requiere de costos”, añadió Orozco.

Según la última encuesta sobre el comportamiento de las remesas realizada por el BCR y publicada en 2019, el 53.8% de los remitentes de remesas utilizan al menos un servicio financiero en Estados Unidos.

Además, los migrantes con mayor grado de estudio son los que tienen o usan mayores servicios financieros en ese país.

Este estudio indica, además, que el 16.8% de los encuestados cuentan con servicios financieros en El Salvador; un 14.6% posee cuentas de ahorro o depósitos a plazo, pero también aclara que existe la oportunidad para ampliar los servicios financieros en el país, ya que los remitentes desean obtenerlos, en especial, para contratar seguros médicos para su grupo familiar y créditos de vivienda.

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Siguen apuntalando la economía

Las remesas siguen siendo uno de los ingresos más importantes para la economía salvadoreña. Este año, en particular, el envío de dinero ha seguido creciendo a medida que la actividad económica de Estados Unidos se ha recuperado.

El economista Rafael Lemus menciona que el crecimiento de remesas se está dando a nivel general en los países receptores y que en algunos el incremento es incluso del 50 % comparado con los flujos de ingresos del año pasado.

“Esto tiene que ver con los planes de expansión que ha brindado el Gobierno de Estados Unidos, así como la recuperación de empleos en dicha nación. Ha sido un Gobierno que ha intentado hacer la expansión del gasto y reactivación, aunado a la solidaridad entre los salvadoreños”, destacó.

Lemus compara, además, que el flujo de remesas que llega al país es similar al Presupuesto General de la Nación, que para este año sobre pasa los $6,000 millones.

“Son más de $6,000 millones, que superan el presupuesto del Gobierno, si uno quita lo que se destina en pago para la deuda”, detalló.

Remesas en Bitcoin hundirían economía

El Gobierno ha dicho que una de las razones por las que se ha aprobado la Ley del Bitcoin es para el envío de remesas, pero el economista senior del ICEFI, Ricardo Castaneda, afirma que si la mayor parte de remesas que lleguen al país, no se hacen a través de dólares, sino que a través de Bitcoin, “la economía se hundiría”, aseveró.

“Todas las transacciones que se hacen en la economía están interconectadas, por ejemplo, lo que recibe en dólares a través de las remesas, es lo que sirve para pagar las importaciones, es decir que si en una economía está recibiendo menos dólares, eso tiene un conjunto de consecuencias porque implicaría que la cantidad de dólares que se van a necesitar para pago de salarios, compra de bienes y servicios, sería insuficiente y por lo tanto provocaría una situación sumamente preocupante y alarmante para el país”, destacó.