Los diputados opositores ven con buenos ojos que por fin la vacuna contra COVID-19 llegue a El Salvador, pero tienen dudas en cuanto a la forma de adquisición del medicamento por parte del gobierno y el proceso de aplicación de la misma.
Esto se debe a que, en el presupuesto de la Nación de 2021, la Asamblea destinó $50 millones de un préstamo destinado para la pandemia para la compra de la vacuna.
El presidente Nayib Bukele informó anoche que la vacuna se comprará con “fondos propios” y que no pertenece al programa COVAX de la Organización Mundial de la Salud (OMS), ya que esas vacunas son donadas y se prevé que ingresen al país en la primera semana de marzo, dijo Bukele en su cuenta de Twitter.
“Si el Presidente (Bukele) dice que esas vacunas las ha comprado con el Presupuesto General de la Nación o con dinero del Estado lo va a tener que demostrar, en los próximos días pediré al Ministerio de Salud y a la Presidencia que demuestre con documentos la compra que se hizo”, afirmó el diputado de ARENA, René Portillo Cuadra.
La jefa de fracción del FMLN, Nidia Díaz y la diputada Margarita Escobar, de ARENA, recordaron que la Asamblea aprobó incorporar $50 millones en el gasto general del Estado para 2021, para la compra de la vacuna exclusivamente, ya que el Gobierno no había considerado fondos para hacerse de la vacuna contra COVID-19.
“En el proyecto de presupuesto 2021 enviado por el Gobierno no contemplaba la compra de medicamentos. Nosotros aquí en la Asamblea le autorizamos $50 millones para la compra de las vacunas, el presidente (Bukele) también está acostumbrado a no rendir cuentas, ni él, ni sus ministros”, expuso Escobar.
“Sería una injusticia de parte de este Gobierno que hace mes y medio le aprobamos dinero para la vacuna, más de $50 millones para la vacuna y sería penoso que le mienta al pueblo salvadoreño. No se vale ocultar al pueblo salvadoreño información”, ahondó Portillo Cuadra.
Por parte del FMLN, las diputadas Nidia Díaz y Anabel Belloso exigieron que el proceso no se centralice para que las personas tengan la posibilidad de acceder a la vacuna, ya que ha sido comprada con fondos de los impuestos que paga la población, ni tampoco usarla con “fines electorales”.
“Sería condenable, como pasó con los paquetes alimenticios que se vean manchados con utilización de campaña electoral. Los fondos fueron aprobados por la Asamblea”, manifestó Belloso.