Faltaban pocos minutos para la medianoche cuando el equipo de El Diario de Hoy llegó a la sede central de la Fiscalía General de la República (FGR), en la urbanización Santa Elena; sobre la calle Cortez Blanco solo había dos autos policiales, casi en sus extremos.
Comenzamos a hacer imágenes del edificio y luego un sujeto, con una chaqueta con logos de la Fiscalía, nos dijo que no podíamos hacer fotos porque estaba prohibido. No supo explicar por qué estaba prohibido. Era uno de dos vigilantes que estaban de turno. Luego apareció otro periodista de un matutino.
Al poco tiempo llegó un pick up con varios hombres de traje. Estos no se mantuvieron dentro. Comenzaba a lloviznar.
Apenas habían transcurrido 30 minutos del 2 de mayo cuando llegó un contingente más grande de policías, entre los que iban varios oficiales. Algunos llevaban chaquetas en las que se podía leer “DECO” (División contra Crimen Organizado), otros eran de la Policía Técnica y Científica.
Un inspector de apellido Tejada se acercó a la entrada principal y con tono imperativo les dijo a los vigilantes que abrieran el portón. Éstos mostraron un poco de resistencia y pidieron tiempo para hacer las coordinaciones necesarias con sus jefes.
Entre el grupo se escuchó decir: abra el portón, abra el portón, venimos en una misión oficial. Era un oficial panzón; luego, Tejada usando un tono menos fuerte les dijo: abra el portón por favor. Lo dijo dos veces. Otro oficial lo secundó: “tranquilo, tranquilo, abra el portón, hombre”.
Los vigilantes accedieron y los policías entraron, casi atropellándose. Para ese momento ya llovía bastante en el sector.
Eran las 00:35 a.m. Los policías no paraban de llegar, muchos de ellos de alto rango, subcomisionados y comisionados, de esos que, desde siempre, han ocupado cargos importantes en la institución pero, sobre todo, en el período presidencial de Elías Antonio Saca, preso en el penal de Mariona por malversar más de 300 millones de dólares durante su mandato.
Esta madrugada, la seguridad de la @FGR_SV intentó hacer su trabajo, pero algunos policías los apresuraban a gritos a abrir el portón para dejar entrar vehículos...
Este oficial dijo que asumiría la responsabilidad de la seguridad...#GolpeDeEstadoElSalvador @elsalvadorcom pic.twitter.com/It0kEL6gQS
— Jorge Beltrán Luna (@Jbeltranluna_) May 2, 2021
Tres minutos pasaron y llegó una camioneta. De inmediato hicieron a un lado al seguridad de la Fiscalía que se encargaba de abrir el portón de acceso vehicular. Aunque no pude verlo, dijeron que en ese vehículo iba Rodolfo Delgado, quien hacía minutos había sido designado como Fiscal General tras la destitución de Raúl Melara, en la primera sesión plenaria del período legislativo 2021 - 2024.
Al tiempo que Delgado llegó, aparecieron los comisionados Héctor Mendoza Cordero, subdirector de Seguridad Pública; Douglas Omar García Funes, subdirector general, Pedro González y otros comisionados.
Un puñado de periodistas se logró colar en el caos que se armó para que el vigilante abriera el portón donde llegó Delgado, pero poco pudieron hacer estando en el lobby de la Fiscalía, puesto que solo a medios estatales permitieron pasar más allá de ese lugar.
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Mientras tanto, el vigilante del portón de acceso vehicular siempre ponía un poco de resistencia, cada vez que le pedían dejar entrar un vehículo. A veces, a gritos le decían que se apresurara a abrir. El vigilante respondía que solo estaba haciendo su trabajo.
Fue entonces cuando un oficial le dijo que no se complicara, que a partir de ese momento, él se hacía responsable de la seguridad y que cualquier situación la enfrentaría él.
Después de eso, el seguridad ya no se involucró en abrir o cerrar el portón; fueron los policías quienes se encargaron de eso.
La invasión de la Fiscalía por parte de Policías fue para garantizar la entrada de Rodolfo Delgado, quien fue electo por la bancada legislativa de Nuevas Ideas, en sustitución de Raúl Melara.
Mientras la lluvia en el lugar no menguaba, de al menos dos autos en marcha se escuchó gritar: corruptos.